"Las primas a las renovables deben ir desapareciendo"
El representante de la patronal europea del sector nuclear en Bruselas desde 2006 reclama que todas las fuentes de energía compitan ya en Europa en igualdad de condiciones.
Barcelona se erige hoy en capital de la poderosa industria nuclear europea. Los principales representantes de un sector que agrupa amás de 800 empresas y genera 400.000 puestos de trabajo se reunirán hasta el próximo miércoles en el Palau de Congresos de Catalunya para analizar desde los retos tecnológicos y laborales de esta industria hasta su siempre complicada relación con la sociedad civil. Santiago San Antonio, secretario general de Sociedad Nuclear Europea, la federación de asociaciones de profesionales del sector que organiza el evento, analiza la coyuntura de la energía nuclear en España y Europa.
PREGUNTA. ¿Cuál es el eje dominante de la edición 2010 de la European Nuclear Conference en Barcelona?
RESPUESTA. El futuro, sin duda. Vamos a repasar tecnologías y proyectos en marcha. Es decir, consideramos que el renacimiento [de la energía nuclear] ya se ha producido, y ahora hay que apoyarlo.
P. ¿Por qué se reúnen en España?
R. La cita se hace cada cuatro años y la SociedadNuclear Española, que es una de las más activas en Europa, se ofreció voluntaria a participar en la organización de esta edición porque consideraron que era un momento adecuado para traer a España una Conferencia que, además, cuenta con exposición y con una participación muy alta.
P. No está prevista la asistencia de ningún representante del Gobierno español. ¿Es normal?
R. Normalmente, en las sesiones de apertura o plenarias suelen asistir representantes de la administración. En este caso, tenemos a Antoni Castells, con seller de Industria de la Generalitat. Y en el Comité InternacionalHonorario figuran Miguel Sebastián, ministro de Industria, oMontilla, presidente de la Generalitat, entre otras personalidades de todo el mundo.
P. ¿Cree que la industria nuclear tiene futuro en España?
R. Pues si las instituciones, los partidos políticos y los Gobierno son inteligentes, debemos volver a la energía nuclear. A tener nuevas centrales y prolongar la vida de las existentes mientras sea compatible con la seguridad, la economía y la tecnología. España importa más del 80% de su energía primaria, desde países cartelizados. Así que la independencia energética de España pasa por la nuclear y las energías renovables. Y la nuclear produce la energía de base.
P. Pero la nuclear sólo produce electricidad y España es exportadora neta en ese terreno.
R. El saldo es prácticamente cero, pero ¿a qué precio estamos generando? Tal vez el mix energético no es el más adecuado. Y se está generando un déficit de tarifa, entre el coste de generación y el precio de venta, que pagan los ciudadanos vía de impuestos. Y se daña la competitividad de la industria española.
P. Cuando habla del precio de generación, ¿se refiere a las primas de las energías renovables?
R. Creo que a las renovables hay que apoyarlas para que se desarrollen tecnológicamente, pero deben comprender que ya han alcanzado un grado de madurez y que las primas deben ir desapareciendo, para que empiecen a competir libremente con las otras tecnologías. En el caso de España, la energía eólica, sobre todo, ya ha alcanzado ese nivel.
P. Y la energía nuclear, ¿puede competir sin ayuda del Estado?
R. Sí. Durante la sesión de apertura de la Conferencia se presentará, precisamente, un estudio comparativo sobre diversas fuentes y quien sale mejor parada es la energía nuclear y el carbón con secuestro de CO2. Lo que necesita la nuclear es un marco estable que le permita recuperar los costes a largo plazo.
P. ¿Por qué no se modernizan los convenios sobre responsabilidad civil de los operadores?
R. Las primas y los límites han aumentado recientemente de forma muy sensible e importante.
P. Pero, ¿se han ratificado esos nuevos límites?
R. No, no están ratificados.
P. ¿Qué le parece la polémica sobre el ATC español o cementerio nuclear?
R. Más que una polémica o un debate, me ha parecido una bronca y una pelea. Había una decisión, tomada ya por el Parlamento de que el ATC era una cuestión a tratar entre el Gobierno y los ayuntamientos. Y llegado elmomento de ejecutar esa decisión, se ha armado una bronca importante.No es forma de proceder en un país democrático.
"El retraso en la planta de Oilkiloto perjudica"
La construcción de una nueva central en Finlandia (Oilkiloto 3) se presentó hace años como el símbolo del resurgir de la energía nuclear en Europa. El proyecto, adjudicado a la francesa Areva, acumula, sin embargo, un enorme retraso y el coste se ha disparado.¿Cómo se explica lo ocurrido en Finlandia?Hay que entender que Oilkiloto 3 era la primera central de su tipo que se construía y ha habido dificultades tanto por la parte de diseño y construcción, como por parte de las autorizaciones necesarias de los reguladores. Y de ahí viene el retraso.¿Ha perjudicado al sector ese retraso?Sí, mucho, mucho. No es bueno que haya ocurrido. Lo mejor es que el proyecto se lleve a buen término lo antes posible, porque la imagen que está dando no es nada buena para el sector nuclear. Las nucleares siempre generan polémica y los países democráticos la opinión pública puede resistirse a su construcción.¿Temen que acabe percibiéndose como una fuente por la que sólo optan países emergentes o dictaduras? Aparte de garantizar el suministro a un bajo coste, la energía nuclear permite a los países un gran desarrollo tecnológico que pueden aplicar en otras industrias. De ahí, el interés de los emergentes. Y ya hay 30 países que han solicitado apoyo a la Organismo Internacional de la Energía Atómica para empezar proyectos nucleares.¿Pero se puede llegar a una dicotomía dictadura/ energía nuclear frente a democracia/ otras fuentes de energía?En 2009, por ejemplo, se comenzaron a construir 15 centrales en todo el mundo, pero nueve fueron en China y tres en Rusia. No veo que ese sea el caso. Antes se asociaba la energía nuclear a la derecha y el movimiento antinuclear a la izquierda. Pero eso ha desaparecido totalmente. Y todos los países que se incorporen a la energía nuclear lo harán bajo el control de la OIEA y se construirán en sitios adecuados y con normas de seguridad adecuadas.