La caída del consumo sitúa en tasas negativas a la inflación subyacente
Uno de los mejores indicadores para medir hasta qué punto está disminuyendo la demanda es comprobar qué ha pasado con los precios de los productos de la cesta de la compra. El INE constata que 32 de las 57 rúbricas que mide el IPC se han abaratado en un año, lo que sitúa la inflación subyacente en tasa negativa por primera vez en la historia y alienta el fantasma de la deflación.
La inflación subyacente es aquella que mide los precios de los productos menos volátiles del índice, por lo que excluye los alimentos frescos y la energía, y es, al mismo tiempo, la que mejor mide la relación entre oferta y demanda. Pues bien, un análisis en detalle de las cifras publicadas el viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), constata cómo 32 de las 57 rúbricas que componen la cesta de la compra empleada para fijar la evolución de los precios cerraron abril por debajo del nivel registrado hace un año. De esos 32 en negativo, 21 están incluidos en la parte más estable del IPC.
Esto es lo que explica que la inflación subyacente bajara en abril un 0,1% anual por primera vez desde 1986 (fecha desde la que se disponen de datos comparables). Esta circunstancia ni siquiera se había registrado durante los ocho meses que el IPC registró tasas negativas, entre marzo y octubre de 2009. Sin embargo, para el Gobierno, este descenso es "algo puntual y se debe en gran medida al efecto calendario de la Semana Santa, que este año se concentró una parte en marzo mientras que en 2009 toda ella se contabilizó en abril", según explicó el viernes el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa. Los descensos más significativos en abril los protagonizaron los precios de la leche (-8,7%), el azúcar (del -6,9%), la fruta (-5,%), el pollo (-4,4%) y las medicinas (-4,5%). Estos números volvieron a alentar el fantasma de la deflación, como una de las graves consecuencias que genera una crisis económica de la magnitud de la actual.
En cuanto a la evolución del índice general, el cambio de temporada en vestido y calzado, los carburantes y la subida del gas y el gasóleo de calefacción en la vivienda propiciaron un repunte del 1,1% mensual, y un 1,5% anual, su nivel más alto desde noviembre de 2008, cuando marcó el 2,4%. Por su parte, el índice de precios de consumo armonizado (IPCA) alcanzó en abril el 1,6% interanual, una décima más que en marzo.
Los impuestos aportan el 20% del IPC
El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó el viernes, junto a los datos del IPC de abril, la tasa armonizada, el IPCA, a impuestos constantes (IPCA-IC), que mide la evolución de los precios considerando que los tributos que los gravan se mantienen sin cambios desde una referencia temporal concreta.Según el INE, el IPCA-IC alcanzó en marzo una tasa interanual del 1,2%, tres décimas por debajo del IPCA de dicho mes, y su variación mensual fue del 0,7%. Esto significa que sobre el 1,5% de inflación registrado en marzo, tres décimas o, lo que es lo mismo, una quinta parte la constituyeron los impuestos que gravan los productos de la cesta de la compra. Para la construcción de este índice, el organismo estadístico tiene en cuenta el IVA, los impuestos sobre hidrocarburos y sobre labores del tabaco, el impuesto especial sobre determinados medios de transporte, y el impuesto sobre las primas de seguros. Volviendo a las cifras de abril, en el detalle por rúbricas destaca el incremento anual protagonizado por el precio del tabaco, que ascendió al 17,1%, uno de los productos con mayor carga fiscal.