Los productores de hormigón denuncian una sangría de empleo por la morosidad
El plan extraordinario de infraestructuras motivó mensajes de euforia contenida entre las constructoras, pero no convence entre los proveedores de materiales para el sector. La Asociación Nacional Española de Fabricantes de Hormigón Preparado (Anefhop) lanzó ayer una carga de profundidad contra la política del Gobierno y las mayores constructoras al afirmar que se está dejando agonizar a centenares de productores.
Según datos de la patronal, la producción de hormigón en 2009 alcanzó en España los 48,9 millones de metros cúbicos, lo que supone una facturación estimada de 2.800 millones. El volumen de hormigón fabricado supone una caída del 28,9% respecto a 2008 y volver a cotas del año 1998. Desde la dirección de Anefhop, que encabeza Javier Martínez de Eulate, se achaca esta merma a un menor volumen de licitación y a la conocida paralización del mercado residencial.
Los síntomas, según el directivo, son evidentes. "La licitación de obra pública ha bajado de los 8.000 millones entre enero y marzo de 2009 a 3.700 millones a marzo de 2010". Martínez de Eulate señaló ante la prensa que el sector "está acostumbrado a contratos por 25.000 millones anuales, por lo que, tras los recortes en inversión, los 17.000 millones del plan de Fomento se van a quedar cortos para 2010 y 2011". El análisis de Anefhop continúa con la cifra de viviendas visadas: 913.000 en 2006 frente a 110.000 en 2009. "No nos creemos que hayamos tocado fondo. Esperamos un 2010 con una caída del 20%", sentenció.
El otro problema de las 1.108 firmas españolas del hormigón (509 representadas por Anefhop) es la morosidad. El sector se ha dejado 10.000 empleos durante la crisis (hoy tiene 22.000 trabajadores) y se debe tanto a la menor demanda como a un creciente plazo de pago entre los clientes.
"El plan extraordinario de Fomento contempla que las constructoras adelanten el dinero y cobren a varios años vista. No sabemos cómo nos van a pagar", dice Martínez.
La patronal denuncia plazos de cobro de 180 a 210 días, cuando "pagamos las materias primas a nuestros proveedores a 60 días".