Zapatero tacha de "absoluta locura" que España pueda necesitar ayuda de la UE
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, consideró hoy una "absoluta locura" y un "despropósito descomunal" el rumor que apunta a que España necesitará un rescate de la Unión Europea como el que ha solicitado Grecia, que en este caso ascendería a 280.000 millones de euros.
"No doy crédito", señaló Zapatero en una rueda de prensa en Bruselas, donde consideró "un hecho muy grave" que un rumor "de esta naturaleza" pueda provocar un desconcierto inmediato en el mercado de valores. "No podemos estar todo el día haciendo caso a las especulaciones", subrayó.
En este sentido, aseguró que no hay que basarse en "pronósticos o hipótesis", sino que hay que ir a "hechos y datos" porque a veces se produce una "sobreinformación equívoca" que hace olvidar los datos reales, que en el caso de España son de una "solvencia fuerte".
A su parecer, estos rumores pueden incrementar el diferencial del bono español y perjudicar a los intereses de España como país, algo que resulta "sencillamente intolerable" y que el Gobierno español va a "combatir".
El jefe del Ejecutivo recordó una vez más que la deuda en España está 20 puntos por debajo de la media europea y que el pago de intereses en España representa el 2% del PIB frente a otros países como Francia y Alemania, donde llega al 3%.
Además, aseguró que la deuda española es "fundamentalmente" a largo plazo y que la evolución de las perspectivas económicas está del lado del crecimiento, aunque muchos organismos e instituciones mantengan que España siguió en recesión en el primer trimestre del año.
"Tenemos pocos días para comprobarlo", señaló Zapatero, en alusión al dato de PIB del primer trimestre del año, que publicará el Instituto Nacional de Estadística (INE) el próximo día 12. "A ver si es así o estamos ya creciendo económicamente", añadió.
De la misma forma, recordó que los ingresos públicos han registrado un incremento durante el primer trimestre de 2010 después de estar dos años a la baja, por lo que consideró que "no hay ninguna razón" para que se ataque a España, porque lo "importante" es que los datos económicos "vayan avalando" la recuperación y el crecimiento.
Confianza en España y Portugal
A pesar de todo, Zapatero reconoció que se vive un tiempo "de alteración" en el que se pueden tomar muchas decisiones en los mercados, que pueden ser "muy coyunturales" y fruto de "rumores" o de una "información insuficiente".
En este contexto, quiso mandar un mensaje de "confianza y tranquilidad" sobre la fortaleza de España, la "solvencia" de las cuentas públicas y la capacidad de recuperación del país. "Y también es la misma confianza que tengo en Portugal", añadió.
Zapatero recordó que desde que empezó la crisis financiera se han oído opiniones sobre la posibilidad de que el sistema financiero español tuviera que afrontar un "grave riesgo" por el exceso del sector inmobiliario y que ahora, dos años después, se puede ver que ha sido uno de los que mejor "ha resistido" de los países desarrollados.
Opiniones "absolutamente infundadas".
"Vuelvo a escuchar opiniones, teóricamente fundadas, sobre el volumen de riesgo del sector inmobiliario para el sector financiero", señaló Zapatero, tras considerar que algunas de estas ideas están "absolutamente infundadas" y son "desproporcionadas".
"Si ésas se toman como buenas pues es entendible que algunas opiniones vayan en la dirección en la que van, pero no tienen fundamento. Lo ha dicho el Fondo Monetario Internacional (FMI) con claridad y lo van a poner de manifiesto los datos reales de la evolución económica del país", indicó.
Preguntado por si se ha dado cuenta de que los mercados señalan sólo a países con gobiernos socialistas (Grecia, Portugal y España), Zapatero se limitó a decir que "no había caído". "Imagínese por un momento si hubiera hecho reflexión parecida a esa", añadió.