La morosidad real del sistema financiero español está en el 9%, según Esade
La morosidad actual del sistema financiero español está por encima del 9%, frente a los datos oficiales del Banco de España del 5,38% (que aún así son los más altos de los últimos 14 años), según el catedrático de Economía de Esade Francesc Xavier Mena.
En la presentación de un informe que ha realizado sobre el sistema financiero español, Mena afirmó que este desfase se debe a que las entidades todavía no contabilizan adecuadamente las provisiones por la depreciación de activos.
En este sentido, fue más allá y consideró que si aplicasen los precios adecuados a la situación actual, ya habría "varias" entidades -algunas catalanas- con resultados negativos, y que si no mejora el contexto económico, habrá casos de números rojos "este año" debido al aumento de dotaciones.
Mena explicó que las familias "van pagando", pero la deuda de los promotores y constructores sigue lastrando las cuentas de bancos y cajas, que están haciendo una "huida hacia adelante" aplazando el reconocimiento de pérdidas con refinanciaciones, adjudicaciones a precios bajos como daciones en pago y canje de deuda por acciones.
Todo ello hace que la morosidad actual del sector de la construcción, del 9,6%, esté "maquillada", según el catedrático, que barajó que sin estas alternativas para evitar impagos, la mora está en niveles de la crisis de 1993, cuando alcanzó el 13%.
Mena destacó que el conjunto del sistema financiero español está preparado para hacer frente a los impagos gracias a las dotaciones acumuladas, pero puntualizó que todo esto "solo será suficiente si no empeoran las cosas", y que dejando de lado a las grandes entidades, las múltiples pequeñas tienen ya problemas.
Así, auguró que una veintena de entidades, "casi todas las pequeñas", tendrán problemas para hacer frente a los vencimientos de deuda que deben afrontar en los próximos meses, para lo que deberán recurrir a las fusiones -de mayor tamaño que las actuales- y a los préstamos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), ya que los mercados internacionales están cerrados para ellas.
Añadió que la nueva normativa internacional obligará a unos requerimientos de capital a finales de 2012 de un ''core capital'' del 8,5%, que "la mayoría de bancos y cajas no cumplen", en un momento en el que no pueden recurrir a grandes plusvalías porque ya han realizado desinversiones de sus participaciones industriales, vendido sus seguros y hasta sus oficinas.
Sobre esta necesidad de capital, Mena afirmó que los bancos pueden recurrir a los accionistas o buscar nuevos, pero las cajas no cuentan con estos instrumentos de capitalización, por lo que vio inevitable que se adopte la fórmula de cuotas participativas con derechos políticos.
Precisamente hoy, el nuevo presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA), Isidre Fainé, trasladó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la necesidad de que estas entidades cuenten con instrumentos para mejorar su capital, preservando tanto la naturaleza jurídica de estas instituciones como la labor social que desarrollan desde hace 150 años.
Mena instó a administraciones y agentes sociales a colaborar en aspectos como la reforma laboral para "revertir la situación económica actual y evitar un empeoramiento", en un contexto en el que España puede verse afectada por la subida de tipos de interés, que el catedrático calculó para "antes de lo que se cree".
Dijo que primero la Reserva Federal en Estados Unidos, y luego el Banco Central Europeo (BCE), se adelantarán a los riesgos inflacionistas optando por subir los tipos de interés incluso "antes de verano". Ello empeorará las cuentas de las entidades financieras y hará que suban las comisiones a los clientes para compensar, agregó.