Los herederos de Gullón van a los tribunales por el control de la empresa
Los herederos de Gullón han acudido a los tribunales para decidir quién debe poseer el 54% de las acciones de la sociedad: los descendientes directos del fundador o su madre, ex presidenta de la empresa galletera, que hasta ahora los tendría en fiducia.
La disputa por el control accionarial de Gullón ha dado una nueva y sinuosa vuelta de tuerca. Los herederos del fundador del grupo galletero han solicitado ante un Juzgado Mercantil de Palencia tomar el control sobre el 54% del capital de la compañía que permanece en manos de su madre -y hasta hace unos meses presidenta de Gullón- María Teresa Rodríguez.
A juicio de los hermanos Félix, Hernán y Rubén, la ex presidenta controla estos títulos desde el fallecimiento de su marido en 1983. Un control que, a su entender, es exclusivamente fiduciario. Por ello, solicitan al tribunal palentino que determine a quién y en qué porcentaje deben ser devueltos estos títulos.
Pero esta reclamación tiene más trasfondo. María Teresa Rodríguez apoya públicamente al ex director general de Gullón, Juan Miguel Martínez Gabaldón, a quien los herederos de Gullón cesaron de su cargo y han demandado por vía penal por las supuestas irregularidades durante su gestión. Juntos, María Teresa Rodríguez y el ex director general poseen cerca del 70% de Gullón.
La vista sobre el control de las acciones se celebra el 12 de mayo
En virtud de esta participación, ambos han solicitado la convocatoria de una junta de accionistas extraordinaria en la que el principal punto a tratar sería la disolución del actual consejo de administración, compuesto por los tres hermanos y herederos de la empresa galletera y por dos hermanos de la ex presidenta. De salir adelante esta propuesta, Martínez Gabaldón y la ex presidenta de la empresa recuperarían la gestión de la sociedad, ya que los tres hermanos y herederos poseen una participación inferior al 12%. En estos momentos, los tribunales palentinos han denegado las solicitudes de dos juntas extraordinarias y aún está pendiente de resolución la tercera solicitud.
Fuentes próximas a la ex presidenta de Gullón muestran su sorpresa ante las dudas sobre la propiedad de los títulos, que hasta ahora no estaba en cuestión y consideran que se trata exclusivamente de una estrategia para impedir que se convoque una junta extraordinaria y se disuelva el consejo.
El director general de la compañía, Félix Gullón, asume que no se habría puesto en duda el control de los títulos de no haberse convocado la junta para disolver el consejo. En este sentido, apunta que el actual equipo gestor ha puesto en entredicho la actuación de Juan Miguel Martínez Gabaldón y no la de su madre quien, asegura, tiene abiertas las puertas de la sociedad. La vista sobre la fiducia se celebrará el próximo 12 de mayo. En ella, se decidirá además si se toman medidas cautelares, en este caso, la suspensión de la junta extraordinaria, siempre que ésta se celebre.
Seis procesos judiciales, una sociedad
El embrollo judicial en el que está inmerso Gullón puede dejar en un segundo plano el desarrollo empresarial del primer grupo galletero de España en volumen, ya que produce 162 millones de kilos anuales. Pero la empresa de Aguilar de Campoo (Palencia) ha entrado en los últimos meses en una espiral que, a día de hoy, ha desembocado en seis procesos judiciales abiertos. Por un lado, la querella criminal contra el ex director general de la empresa por las presuntas irregularidades en la gestión de la compañía. El ex directivo, Juan Miguel Martínez Gabaldón, también llevó a los tribunales su despido. æpermil;stos determinaron su readmisión o una indemnización de 8,2 millones, que la empresa ha recurrido. La tercera vía judicial es la petición de la ex presidenta del grupo para convocar una junta en la que disolver el consejo. El cuarto paso es la demanda para decidir si la ex presidenta controla el 54% del capital como fiducia de sus hijos. Las dos últimas demandas se centran en la idoneidad de la compra de terrenos y acciones por parte del ex director general.