Reverte y Punset asedian las librerías catalanas
Sant Jordi es un día grande en Cataluña, sobre todo para los libreros, que esperan facturar alrededor de 20 millones de euros (un 7,6% del volumen anual de ventas), según el Gremi de Llibreters de Barcelona i Catalunya. Una cifra, por cierto, que ni siquiera la crisis ha logrado alterar en los últimos tres años. El 23 de abril es sinónimo en Barcelona de cientos de puestos de venta de libros y de rosas, pero también de largas colas en la Rambla y el paseo de Gràcia para obtener un ejemplar firmado por el propio autor.
Lo Nou Diccionari Lleidatà-Català (Alfazeta), de Robert Masip, Fernando Montardit y David Prenafeta; El somni de Tarraco (Edicions 62), de Xulio Ricardo Trigo, y Rere els murs (Columna), de Núria Esponellà, se llevaron el viernes la mayor parte de las ventas en las provincias de Lérida, Tarragona y Gerona, respectivamente.
En cuanto a Barcelona, ciudad que aglutina más de la mitad del volumen total, habrá que esperar para conocer al triunfador.
En castellano, El asedio (Alfaguara), de Arturo Pérez-Reverte, se postulaba a media tarde del viernes como vencedor fuera de la Ciudad Condal, si bien El viaje al poder de la mente (Destino), de Eduard Punset, disponible en catalán y castellano, podría dar la sorpresa.