AEB y CECA alertan de que la nueva regulación penaliza a la banca 'retail'
Los bancos y cajas españoles han respondido, a través de sus patronales (AEB y CECA, respectivamente), a la propuesta de regulación del Comité de Basilea. Unos y otras consideran que la definición de capital sugerida y las medidas para evitar el apalancamiento penalizan injustamente a la banca minorista frente a la banca de inversión.
Las patronales bancarias de todo el mundo andan revueltas. El borrador de cambios regulatorios emanado, en diciembre, del Comité de Supervisión Bancaria de Basilea, amenaza con poner patas arriba las actuales definiciones de capital, solvencia y liquidez. El pasado viernes concluía el plazo para que el sector se pronunciara sobre las propuestas, y en la localidad Suiza han recibido una avalancha de cartas (en concreto, 262 documentos) con innumerables peros y matizaciones.
La banca española no ha sido menos. Tanto la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) como la Asociación Española de Banca (AEB), han enviado la postura sobre las diferentes materias en revisión. Los tradicionales rivales han coincidido en que la ya conocida como regulación de Basilea III supone una grave amenaza para la banca comercial y, en cambio, no penaliza lo suficiente a la banca de inversión, un colectivo que está entre los principales responsables de la crisis financiera internacional.
"La gran cantidad de reformas regulatorias, paradójicamente, suponen una carga mayor para el sector bancario especializado en banca minorista ('retail'), que ha sido el más resistente durante la crisis", apunta en documento remitido por la CECA.
En concreto, la patronal de las cajas se rebela contra la intención de Basilea III de fijar unos niveles máximos de apalancamiento. Arguementa que la propuesta "fomenta la filosofía de captar operaciones y titulizarlas", frente a la alternativa minorista de vender créditos y retenerlos en el balance. Así, la medida parece "sancionar a los bancos menos arriesgados", según la CECA.
La AEB también advierte de que la nueva regulación "será más discriminatoria para la banca minorista que para otros tipos de bancos". Argumenta, que "no parece razonable que las titulizaciones, instrumento básico utilizado por la banca retail para movilizar préstamos concedidos a familias y empresas y, además, elegibles para descontar por los Bancos Centrales por su alta calidad, no sean clasificados como activos de alta liquidez", a la hora de calcular los nuevos ratios legales de liquidez.
Financiación a particulares
En cuanto a las exigencias de acumular más capital y de mayor capital, así como de ciertos activos líquidos, tanto AEB como CECA recuerdan que podría producir un exceso de demanda sobre estos activos, lo que mermaría la rentabilidad de las entidades financieras, encarecería los préstamos a particulares, y reduciría el flujo de crédito al sistema.
Otra coincidencia es la necesidad de fomentar una aplicación progresiva de Basilea III (la primera fecha de la que se ha hablado es enero de 2012) y, sobre todo, homogénea entre países, para que no haya una distorsión competitiva.
Entre las reclamaciones específicas de las cajas de ahorros, destaca la limitación en la definición de capital. La CECA considera que no debe tomarse a las acciones como el único instrumento de capitalización relevante. "El proceso no parece estar teniendo en cuenta suficientemente la pluralidad existente en el sector", apunta.
Los expertos de la Confederación no entienden que las participaciones preferentes, un instrumento clave para que las cajas capten fondos, no computen como capital Tier I (de máxima calidad). La AEB también recoge esta crítica, aunque pone menos énfasis.
La penalización de las participaciones minoritarias
Otro de los aspectos de Basilea III que más asusta a la banca española, especialmente a las cajas, es la penalización de las participaciones minoritarias. Hasta ahora, la cartera industrial contabilizaba como capital Tier I (de máxima calidad). A este respecto, la CECA entiende "que se debería establecer un tratamiento más favorable a las participaciones estratégicas con horizonte temporal a largo plazo y considerarse los efectos positivos de la diversificación".La Caixa ha hecho de esta demanda su caballo de batalla, ya que es el primer inversor del país, a través de su holding de participadas, Criteria, que tiene una capitalización que roza los 13.000 millones de euros. El director general de la caja, Juan María Nin, ha recordado en varios foros que penalizar las inversiones industriales puede ser muy dañino para la economía española.En su propia argumentación contra Basilea III, la caja catalana recuerda que así se desincentivaría la diversificación de las inversiones.
Santander defiende su modelo y la labor del Banco de España
Santander, al igual que La Caixa o Bancaja, han remitido su propio argumentario sobre la nueva regulación. En el mismo, el grupo presidido por Emilio Botín, recuerda que una supervisión exhaustiva (intrusive, es el adjetivo utilizado en inglés) se ha demostrado como mucho más efectiva que nuevas dosis de regulación financiera. El marcaje en corto del Banco de España ha sido señalado por todo el sector como una de las claves de que la banca nacional haya capeado mejor el temporal que sus rivales de otros países.Santander también apunta que "las nuevas exigencias de capital no puede sustituir a una sólida y robusta política de gobierno corporativo". Además, insiste en que el tamaño de la entidad no es el factor único para determinar el riesgo sistémico de la misma.En la carta remitida por la AEB se defiende el modelo de captación de liquidez por filiales, practicado por Santander, frente al modelo propuesto de liquidez centralizada.
Calendario
l El ritmo de debate y aplicación de las nuevas normas de solvencia y liquidez preocupan notablemente a las entidades financieras. En principio, durante el tercer trimestre de 2010, el Comité de Basilea analizará las alegaciones presentadas por la industria y para comienzos de 2012 podrían a empezar a exigirse. Las patronales defienden con insistencia una segunda ronda de contactos.