Figueruelas se plantea ampliar el turno de noche por el alza de pedidos

La planta de General Motors (GM) en Figueruelas (Zaragoza) podría decidir mantener el turno de noche, cuya supresión estaba prevista para el 22 de abril, ante el aumento de la carga de trabajo en la factoría, con la producción de 8.500 corsas.

La coincidencia del incremento de pedidos con el inicio de ensamblaje del nuevo modelo Meriva también podría recortar el expediente de regulación de empleo para 600 trabajadores, que expira en noviembre.

Otra de las posibilidades para la empresa es el retraso en la salida de los trabajadores afectados por el expediente estructural, cuyo primer contingente de 351 trabajadores (de un total de 900 empleados) tiene prevista su marcha el 23 de abril.

Figueruelas está viviendo, a pesar de la reestructuración, un momento dulce, gracias a la favorable evolución del mercado, después del fuerte castigo que ha vivido el sector del automoción durante esta crisis. También las plantas de la compañía de Gliwice (Polonia) y Rüsselsheim (Alemania) se han visto obligadas a la ampliación de turnos para atender la demanda.

General Motors mantiene una política de ajustar al máximo producción y pedidos, con el fin de evitar el inmovilizado en stocks. Por ello, la decisión de la empresa de prorrogar el turno de noche estará condicionada por la urgencia de los últimos pedidos.

El acuerdo alcanzado entre la empresa y los sindicatos facilita la aplicación de una flexibilidad beneficiosa en este tipo de situaciones. Según impresiones recogidas entre miembros del comité de empresa, el número de trabajadores afectados afectados por el expediente de regulación temporal podría bajar de los 600 trabajadores inicialmente previstos a menos de la mitad, en el caso de que las actuales condiciones sigan manteniéndose.