Citi pacta indemnizar a los afectados de Lehman y les ofrece el 55% del nominal
Citi ha preferido evitar la vía judicial y ha alcanzado un acuerdo con los clientes que invirtieron en notas estructuradas de Lehman por el que les pagará 43 millones de euros, incluidos los gastos judiciales.
Citi ha optado por alcanzar un acuerdo con los clientes que adquirieron notas estructuradas de Lehman Brothers distribuidas en España y que se vieron afectados por la quiebra de la entidad, en septiembre de 2008. Tras negociar con la asociación de consumidores Adicae y con los despachos de abogados Zunzunegui y Jausas , Citi se compromete a adquirir esas notas estructuradas por un precio equivalente al 55% del nominal, lo que supondrá un desembolso de unos 43 millones de euros. Según Adicae, el 90% de los afectados aceptan la oferta.
Citi resuelve por tanto de forma extrajudicial la demanda que habían presentado los afectados y sobre la que estos días se esperaba el fallo del tribunal, después de la vista oral que se celebró en Madrid en febrero. El acuerdo beneficia a los más de 2.700 inversores que adquirieron notas estructuradas de Lehman, por valor de 78 millones de euros. "Un acuerdo colectivo evita la indeseable e injusta dispersión de acuerdos individuales y es una solución mucho más favorable y eficaz para el conjunto de afectados", señalan desde Adicae.
Los despachos Zunzunegui y Jausas han reclamado una indemnización para los afectados por notas de Lehman por entre el 40% y el 75% del nominal, según los casos. Pero muestran su satisfacción puesto que la oferta de Citi será en metálico, por un 55% del nominal, que consideran "un punto intermedio y razonable" y supone además que el banco asume los gastos judiciales del proceso. A cambio, Citi elude cualquier tipo de responsabilidad en la comercialización de las notas.
Citi queda libre de responsabilidad por la venta de notas de Lehman
Pero la quiebra de Lehman aún colea en los tribunales. Bankinter fue condenado a resarcir a los clientes afectados en una sentencia recurrida por el banco y también por los afectados. Aún está por precisar el valor razonable de las inversiones afectadas, que la entidad española defiende próxima a cero.