El ex consejero delegado de Citi pide perdón por su implicación en la crisis financiera
El ex consejero delegado de Citigroup Charles Prince se disculpó hoy por el papel de la entidad y el suyo propio en la crisis financiera, al no haber previsto la situación, y defendió que no pensó en su momento que los valores que llevaron a la crisis supusieran "ningún riesgo".
"Sólo puede decir que lamento profundamente que nuestra gestión, empezando por mí, no fuera más profética y que no hubiéramos previsto lo que teníamos delante", aseguró durante su comparecencia ante la Comisión Federal de Investigación de la Crisis Financiera (FCIC) para dar explicaciones sobre su papel y posible influencia en la reciente crisis financiera.
Sin embargo, Prince señaló que, aunque "lamentablemente" no fueron capaces de prevenir las pérdidas que se registraron, éstas no fueron el resultado de la gestión o de la falta de atención del consejo de la entidad o de un fallo en la aportación de información.
En este sentido, Prince defendió que un prolongado periodo de tipos de interés bajos creó la sensación de había comenzado una nueva era de "un menor riesgo generalizado" en el que aumentaron las hipotecas 'subprime'. Sin embargo, en un momento dado las agencias de calificación redujeron de forma precipitada los rating lo que provocó "una congelación amplia y generalizada de los mercados de valores".
Por su parte, el que fuera secretario del Tesoro durante la Administración de Bill Clinton, y que posteriormente trabajó para Citigroup, Robert Rubin, afirmó que la crisis fue causa de un conjunto de factores, como los "excesos" del mercado, los bajos tipos de interés, el fuerte aumento de los precios de la vivienda y su precipitada caída o los rating de la agencias de calificación crediticia.
En esta línea, Rubin consideró que todo el sistema financiero es responsable de no haber reconocido la importancia de la "poderosa combinación" de estos factores y la seria posibilidad de una gran crisis financiera, y pidió disculpas por ello.
Por todo ello, subrayó que la lección que ha enseñado esta crisis es que el sistema financiero está sujeto a mayores riesgos de los que cualquiera hubiera previsto.