Toyota, multada por ocultar defectos que podrían conllevar demandas judiciales
Las autoridades estadounidenses aumentaron hoy la presión sobre Toyota al acusar al fabricante de ocultar defectos en sus vehículos durante meses, por lo que le impusieron la máxima multa posible, lo que puede tener graves repercusiones en futuras demandas judiciales.
La multa impuesta a Toyota es de 16,3 millones de dólares y la empresa japonesa tiene ahora dos semanas para disputar la decisión de la Administración de Seguridad en la Carretera (NHTSA). Pero el duro lenguaje utilizado por el titular del Departamento de Transporte de Estados Unidos, Ray LaHood, en el comunicado en el que anunció el castigo al fabricante japonés le puede suponer mucho más dinero.
"Ahora tenemos las pruebas de que Toyota no cumplió con sus obligaciones. Lo que es peor, a sabiendas durante meses ocultaron a las autoridades de EEUU un peligroso defecto y no actuaron para proteger a millones de conductores y a sus familias", afirmó LaHood. El defecto al que se refería LaHood, y por el que el Departamento de Transporte ha impuesto la multa, es el de los pedales del acelerador atascados, que obligó a Toyota a llamar a revisión a 2,3 millones de vehículos en Estados Unidos.
Toyota también ha reconocido otros defectos en alfombrillas y frenos que en total han supuesto la llamada a revisión de más de 8 millones de vehículos, en su mayoría en Estados Unidos. Toyota respondió al comunicado de LaHood con su propia declaración en la que afirmó que "aunque no hemos recibido su carta todavía, entendemos que NHTSA ha tomado una postura sobre esta llamada a revisión".
"Ya hemos adoptado una serie de importantes medidas para mejorar nuestras comunicaciones con reguladores y clientes en temas relacionados con la seguridad como parte de nuestro reforzado compromiso global de garantías de seguridad", añadió la empresa. Pero la categórica afirmación por parte de las autoridades estadounidenses de que Toyota ocultó durante cuatro meses "un peligroso defecto" será sin duda utilizado por los abogados que están programando demandas contra la empresa.