Sanidad implica en el recorte de gasto regional a la industria farmacéutica
La ministra de Sanidad quiere concluir hoy la negociación del pacto sanitario que lleva meses en negociación con las comunidades autónomas, un acuerdo de Estado que fue propuesto por su antecesor, Bernat Soria, y que de momento no ha podido cerrarse. El mayor inconveniente para llegar a un documento de consenso ha sido la petición reiterada de las autonomías de alcanzar primero un pacto de financiación.
Sanidad llega al Consejo Interterritorial de hoy con un documento negociado con los consejeros y que, por lo tanto, prevé firmar y dar a conocer tras la reunión. El pacto incluye diversos puntos en materia sanitaria, pero también respecto a la financiación. Desde el departamento de Jiménez se ha hecho saber a los consejeros que la Administración central no aumentaría los presupuestos destinados a los servicios de salud, así que se ha optado por recurrir al recorte de gasto farmacéutico, de 12.506 millones en 2009, como la vía para ayudar a los ajustadas cuentas autonómicas.
El Ministerio va a proponer a las comunidades rebajar sus facturas en medicamentos, para lo que el departamento de Jiménez reducirá los precios de referencia de los fármacos. Este precio es el oficial, que establece Sanidad, para cada producto cuando un ciudadano acude con la receta a la farmacia. Por lo tanto, quien asumirá el recorte del gasto será la industria farmacéutica, que verá reducidos sus ingresos.
El montante del recorte todavía no se conoce y dependerá exclusivamente de cuánto y en qué medicamentos se decide rebajar el precio. La idea de la ministra es introducir los primeros recortes ya en 2010 y el resto para el año que viene.
Desde Sanidad se muestran optimistas de firmar hoy el pacto, en tanto que las comunidades no se van a ver perjudicadas por el recorte del gasto. De hecho, esperan una unanimidad tanto de los consejeros socialistas como populares, igual que ocurrió en las medidas para combatir la gripe A. Un portavoz del Ministerio apunta a que entonces se dio una imagen de unidad a los ciudadanos que ha sido bien valorada y que se desea repetir.
Rechazo al copago de fármacos
Desde Sanidad se sabía que había tres opciones para solucionar los problemas de financiación: recorte de gasto de medicamentos, una mayor financiación por parte del Estado (descartado desde el principio) y el copago de los ciudadanos en la compra de fármacos.Jiménez ha trasladado a los consejeros su rechazo total a esta fórmula de copago para los pacientes a la hora de acudir a la farmacia con la receta del médico. No se quiere trasladar el coste de esta impopular medida a los ciudadanos y se ha pensado en que la industria farmacéutica tiene margen para asumir el recorte.