La ciencia ficción busca su primer Oscar grande
Sólo 'Star Wars' optó antes a mejor película desde un género decisivo en la historia del cine
La 82 ceremonia de entrega de los Oscar que tendrá lugar este domingo en Los Ángeles (en directo por Canal+) puede ser la primera que premie al género más taquillero del cine contemporáneo. Porque nunca antes una película de ciencia ficción ha conseguido el más preciado galardón del séptimo arte, y Avatar parte como clara favorita para lograrlo, en lo que tal vez pueda considerarse como una reivindicación, o quizá sólo una normalización.
De hecho, solo otra película de ciencia ficción, La guerra de las galaxias, logró en 1977 ser candidata al mejor film. Otras que han hecho historia y aparecen regularmente en los listados de las cien mejores películas de la historia del cine, caso de Blade Runner o 2001, una odisea del espacio, solamente consiguieron candidaturas o premios en categorías técnicas -efectos especiales, sonido, etc.- o, como mucho, al mejor director -fue aspirante Stanley Kubrick por 2001-.
El papel de la ciencia ficción como motor de la historia del cine, desde que George Méliès filmara la primera "gran producción" de la historia con su Viaje a la Luna (1902), resulta indiscutible. Por el lado más obvio, es incuestionable su contribución a desarrollar aspectos técnicos con los que cubrir las necesidades del relato. Pero también por su peso icónico. Según el ensayista inglés John Clute, "la ciencia ficción ha emergido de los ghettos en que se movió durante décadas para convertirse en un referente fundamental. Las principales películas del género no sólo son reconocidas, sino que han definido la manera en que hoy todos nos imaginamos el futuro".
Esta divergencia entre la Academia y la propia historia del cine casi con seguridad se verá parcialmente amortiguada desde este año con la elección de diez aspirantes al premio a la mejor película en lugar de las cinco tradicionales. Lo que en la revista Variety se calificó como "la norma El caballero oscuro", en referencia a la película de la serie Batman estrenada el año pasado, triunfadora en taquilla y con gran reconocimiento crítico, que sin embargo no pudo lograr una nominación debido a la preponderancia de las "películas serias". Este año, no sólo logró la candidatura Avatar, sino otra cinta de ciencia ficción, Distrito 9.
El reconocimiento a Avatar, que de hecho aspira a un total de nueve premios, parece ligado inexcusablemente a la figura de James Cameron. El director llevaba sin ponerse detrás de las cámaras desde 1997, cuando firmó una de las tres películas que ha cosechado más premios de la Academia, Titanic: sus once estatuillas igualan las obtenidas antes por Ben Hur y después por El señor de los anillos. El retorno del rey. Esta obra es vista en Hollywood como una demostración de músculo no sólo artístico, sino también financiero, al ser la película más cara de la historia en términos absolutos (300 millones de dólares) y estar a la caza del título de la más taquillera.
Por contra, la propia personalidad del hombre que se proclamó "rey del mundo" tras el desfile triunfal de Titanic puede pesar en su contra, así como el hecho de que se trate al fin y al cabo de un título "menor". En los últimos días, en mentideros de Hollywood han crecido los rumores de que la única competidora seria de la cinta de Cameron, En tierra hostil, que también concurre con nueve candidaturas, podría dar alguna sorpresa.
El éxito de Avatar, sin embargo, no está claro que le sirva a la ciencia ficción en su conjunto. Para Fernando Moreno, profesor de Teoría del Texto Dramático de la Universidad Complutense y que publicará próximamente su tesis doctoral sobre ciencia ficción, "la mala construcción narrativa de Avatar impide que se contemple como cine maduro. Causa sorpresa por el innovador uso cinematográfico de unos recursos de rica tradición literaria -poco conocidos para el espectador medio-, un ritmo muy ágil y unos efectos especiales cuya regularización hará que la película envejezca mal. Hay muy buena ciencia ficción, pero Avatar no lo es".
En la ceremonia del domingo hay dos finalistas españoles. Penélope Cruz aspira a repetir como mejor actriz secundaria por Nine, aunque sus opciones parecen remotas, mientras que La dama y la muerte, producida por Antonio Banderas, podría proclamarse como mejor cortometraje de animación.
Las grandes películas de ciencia ficción de la historia
'Metrópolis', futurismo con mensaje . El reestreno en el pasado Festival de Berlín de una nueva versión de este clásico (1927) con metraje adicional ha vuelto a ser un acontecimiento. El escritor estadounidense Isaac Asimov relataba el impacto que le supuso en su infancia ver la película, y cómo asociaba a Alemania con el futuro. Pero Metrópolis era, precisamente, una denuncia velada de lo que aguardaba a Alemania, y precipitó el exilio de su director, Fritz Lang.'2001', cuando el género se hizo adulto . Arthur C. Clarke contaba que Stanley Kubrick le dijo en su primera conversación que aspiraba a realizar "la película de ciencia ficción por antonomasia". Como tal fue recibida en su estreno en 1968, pese a que sus tesis de fondo -sobre las fronteras entre religión y ciencia, sobre las inteligencias artificiales, etc.- no quedaran del todo claras y a que generaciones de espectadores se sintieran confundidos por su final psicotrópico.'Star Wars', superfenómeno comercial . La única película de ciencia ficción que había aspirado al Oscar a mejor film abrió en 1977 las puertas al gran espectáculo contemporáneo, el que sólo podía disfrutarse en salas de cine en oposición al crecimiento de la televisión. Y también a la mercadotecnia aplicada a los productos audiovisuales como fuente de ingresos incluso por encima de la taquilla, algo que George Lucas vio desde la génesis de su proyecto.'Blade Runner', un fracaso en taquilla . El estreno de Blade Runner en 1982 supuso un notable fracaso en taquilla batida casualmente por otra película de ciencia ficción, E.T. Sin embargo, a la postre esta cinta ha sido escogida como la segunda más influyente visualmente hablando de la historia del cine. Su visión de un futuro húmedo y oscuro, junto al pesimismo del guión basado en la novela de Philip K. Dick, ha impregnado toda la cultura posterior.'Matrix', una revolución iconográfica . Rodada en Australia por un equipo semidesconocido, protagonizada por actores en la cuesta abajo de su carrera y con elementos chocantes de cine oriental, Matrix fue la sorpresa en la taquilla de 1999 y se convirtió en poco tiempo en la película de referencia de la nueva era de internet. Su duda sobre lo real y lo virtual es citada en cualquier trabajo sobre cultura digital, pese al mal regusto que dejaron sus dos continuaciones.'Distrito 9', otra candidatura histórica. Una película sudafricana con un presupuesto modesto -30 millones de dólares- se convirtió este verano en la gran sorpresa de la taquilla en Estados Unidos, y luego en la segunda película de ciencia ficción finalista para los Oscar de este año. Es el debut de Neill Blomkamp, que amplía un corto que él mismo rodó en 2005 con claras referencias alegóricas al apartheid de su país, con el apoyo como productor de Peter Jackson.
Sobres
El proceso de votación de los ganadores de los Oscar es auditado desde hace 76 años por PricewaterhouseCoopers y sus antecesoras. Dos socios de PwC en Los Ángeles son las únicas personas que ya conocen los ganadores.
Las cifras
300 millones de dólares costó 'Avatar', y gastó otros 150 en promoción.9 candidaturas a los Oscar ha conseguido, las mismas que 'En tierra hostil'.