La recesión en España y el parón en la UE lastran la confianza del consumidor
El frenazo que ha sufrido la recuperación económica en los principales países de la UE y la recesión en España (que ya encadena siete trimestres con crecimiento negativo) han pesado demasiado en la confianza del consumidor en España, que retrocedió 7,6 puntos en febrero, según el indicador que elabora el Instituto Oficial de Crédito (ICO). De este modo regresa a los niveles alcanzados en septiembre de 2009, por el descenso experimentado por los dos grandes indicadores que lo componen: el de expectativas, que cayó 7,2 puntos, y el de la situación actual, que bajó en 7,9 puntos.
Lo que no ha variado ha sido la percepción que tienen los consumidores sobre el aspecto más valorado (la situación actual del mercado nacional) y el peor valorado (la creación de empleo) de la economía.
La incertidumbre sobre la recuperación de la economía europea también condicionará la decisión que adopte hoy el Banco Central Europeo (BCE) respecto a los tipos de interés en la zona euro. La mayoría de analistas consultados por Reuters coinciden en que el BCE mantendrá intacto el precio del dinero y en que tampoco realizará cambios en el cuadro económico de la eurozona, ya que pese a que ya han aparecido los primeros signos de recuperación en países como Alemania o Francia, éstos son demasiado débiles e irregulares.
La principal novedad que puede aportar el presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, se refiere a las políticas de liquidez de la institución para el segundo trimestre. La debilidad de la recuperación, la falta de crédito en el caso de las pymes y los temores a la falta de solvencia de algunos países como Grecia podría hacer cambiar de opinión a Trichet, que había anunciado que se retirarían progresivamente las inyecciones de liquidez. Los analistas consideran que esos factores empujaran al BCE a mantener entre abril y junio la subasta semanal a un tipo de interés fijo, lo que es interpretado por los expertos como un signo de que los tipos en la zona euro no se moverán al menos en los próximos seis meses.
España, el país en el que más se tarda en abrir un negocio
España es el país de la Unión Europea en el que más tiempo se tarda en abrir un negocio, según los datos del Banco Mundial correspondientes a 2009. En España, los emprendedores necesitan 47 días y 10 trámites diferentes para abrir una empresa, muy por encima del resto de los países de su entorno. Sólo Polonia, en el que los emprendedores emplean una media de 32 días, se acerca a las cifras de España. En cuanto al número de trámites, sólo Grecia exige realizar más trámites distintos que España para iniciar un negocio.