Siemens prevé facturar 6.000 millones hasta 2014 con las redes para coches eléctricos
Siemens prevé una explosión del negocio de redes inteligentes para satisfacer las necesidades de la llegada masiva del coche eléctrico. Tanto es así, que la compañía alemana cuenta con facturar 6.000 millones de euros hasta 2014 en el campo de las soluciones eléctricas inteligentes en todo el mundo, a través de las que se recargarán este tipo de vehículos. Para abordar este mercado, la multinacional ha creado una unidad de negocio.
Las redes inteligentes (smart grids, en inglés) permiten la comunicación en tiempo real entre el consumidor, los gestores, las empresas eléctricas y, en general, todos los agentes del sistema. Además, optimizan el consumo energético según criterios medioambientales o de precio.
El presidente de Siemens en España y el suroeste de Europa, Francisco Belil, aseguró ayer en una presentación sobre la compañía a la que asistió el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que la suya es la única empresa que dispone de la tecnología necesaria para dar una respuesta a todas las áreas que componen estas redes (medición y facturación, infraestructura de red y control y gestión de datos).
El directivo aseguró además que es la única capaz de cubrir "todas las facetas de la electromovilidad", como la generación y la distribución de energía hasta la tecnología de recarga pasando por los componentes de tracción.
Belil explicó que en la actualidad su compañía trabaja en las redes eléctricas inteligentes, así como en la infraestructura de recarga y en el campo de los componentes para el coche eléctrico.
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, por su parte, anunció que los nuevos autobuses y taxis de Madrid que se adquieran según se vaya modernizando la flota no podrán utilizar diésel como combustible, para luchar contra las emisiones de dióxido de nitrógeno. El regidor madrileño avanzó que el consistorio está trabajando con las principales empresas petrolíferas que cuentan con gasolineras en la ciudad para implantar en todas ellas electrolineras, es decir, puestos de recarga para los coches eléctricos.