Ordóñez reivindica su autoridad para definir el nuevo mapa español de cajas
El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, reclamó ayer la potestad conferida por el Parlamento al supervisor financiero para pilotar el proceso de concentración en el sector de cajas, al margen de las opiniones de las autoridades, las firmas de consultoría o de las propias entidades.
El gobernador del Banco de España pronunció ayer en Vigo una de las conferencias más trascendentales de su mandato. Miguel Ángel Fernández Ordóñez defendió el papel que está jugando la institución ante un público, y en un momento político, que parecía escrito en un guión previo.
El escenario fue el Club Financiero de Vigo, una ciudad que vive tiempos revueltos por la decisión de la Xunta de Galicia de promover la fusión de la caja local, Caixanova, con su rival regional, Caixa Galicia.
Entre los oyentes, el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo y los presidentes de las dos entidades. El de Caixa Galicia, José Luis Méndez, que apoya la operación, y el de Caixanova, Julio Fernández Gayoso, quien prefiere buscar alianzas con firmas de otras comunidades.
Reclama la labor del Banco de España, frente a las opiniones de políticos, firmas y patronales
En este contexto, Fernández Ordóñez reivindicó la autoridad otorgada por el Parlamento al Banco de España para liderar la reestructuración del sector de cajas. Tras recordar que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) prevé la posibilidad de disponer de recursos públicos en "casos preventivos", subrayó que en esas situaciones es el supervisor quien tiene la última palabra, "frente a las conclusiones que puedan expresar los propios gestores de las cajas, o las autoridades, o las asociaciones, o los consultores, o los institutos económicos o cualquier otra organización".
Este golpe de autoridad se produce tan sólo unos días después de que el Ejecutivo gallego hiciera público un informe de la consultora KPMG que avalaría la fusión de Caixa Galicia y Caixanova, y en plena guerra de declaraciones entre el Gobierno central y el autonómico sobre la posible inconstitucionalidad del decreto que aprobó el FROB y de la ley gallega de cajas.
En diversos círculos políticos de la región se había argumentado que la visita del gobernador a Vigo tenía por objeto presionar a Feijóo y a las entidades para que no llevaran adelante la creación de una gran caja de Galicia. Desde el Banco de España aseguran que la visita estaba planificada con meses de antelación.
Además de reclamar la tarea del supervisor de juzgar "con criterios exclusivamente profesionales y sin que pueda interferir ningún otro interés personal o colectivo, si un proyecto de integración es suficientemente sólido o no", Ordóñez recordó la importancia de que se avance rápido en la integración del sector.
Fusiones urgentes
El máximo responsable del regulador apeló a la responsabilidad de aquellos que están implicados en operaciones de fusión "para que no retrasen de manera innecesaria su conclusión, ya que ese tiempo perdido podría acabar perjudicando el flujo de crédito a familias y empresas".
Preguntado en un coloquio posterior a su discurso sobre la posibilidad de que un Gobierno regional intentase forzar una operación entre cajas apuntó que, "al final, las decisiones son de los órganos de decisión de las cajas". También aseguró que durante el acto no se había tratado "en absoluto" el asunto de posible integración de Caixanova y Caixa Galicia.
Feijóo defiende la validez de la ley gallega de cajas
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, demandó ayer "igualdad de trato" y que no haya "discriminación que afecte a las competencias de Galicia" porque su ley de cajas, aprobada por el Parlamento autonómico en diciembre con los votos del PP y del BNG, es "muy similar" a las de otras comunidades como "Andalucía, Cataluña o País Vasco".Sobre la intención del Gobierno central de llevar al Tribunal Constitucional la ley gallega, Feijóo argumentó que "no hay ningún planteamiento en la norma gallega que no esté en otras leyes, que en este momento no están recurridas"."Estoy persuadido de que habrá igualdad de trato y no habrá discriminación que afecte a las competencias de Galicia en perjuicio de otras comunidades autónomas que tienen leyes vigentes y tienen leyes no recurridas", subrayó el presidente.Expertos del Ministerio de Economía han asegurado a CincoDías que hay varios artículos en pueden considerarse inconstitucionales, y que el departamento está a punto de finalizar un informe para recurrirla.Al mismo tiempo, el Ejecutivo gallego ya anunció hace meses que albergaba dudas sobre la constitucionalidad del FROB, porque "invade la tutela financiera de las comunidades autónomas". Núñez Feijóo desvinculó ayer la decisión que adoptarán, de la que puede tomar el Ejecutivo central sobre si litiga contra la ley regional de cajas.Feijóo también reclamó ayer que el Banco de España se mantenga como "garante de la objetividad, de la imparcialidad y del trato financiero igualitario de todas las entidades financieras". Por ello, le advirtió de que "le corresponde dar respuesta a sus propias actuaciones", al ser requerida su opinión sobre una postura contraria a la ley de cajas de Galicia.
El supervisor pide facilitar el acceso a recursos propios
Además de reclamar la necesidad de avanzar lo más rápido que sea posible en la concentración del sector de cajas, el Gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, defendió la importancia de abordar cambios normativos que faciliten el acceso de las cajas de ahorros a los recursos propios.A día de hoy, estas entidades tan sólo tienen dos vías para fortalecerlos: con cargo a los beneficios cosechados, o por medio de la emisión de cuotas participativas. La primera alternativa se va a ver muy restringida por las caídas de los resultados que se vivirán en los próximos trimestres, mientras que la segunda, por la que tan sólo ha optado Caja Mediterráneo, presenta el problema de la falta de derechos políticos de los cuotapartícipes.Ordóñez recordó que "para afrontar las nuevas exigencias regulatorias" las cajas "van a necesitar nuevos instrumentos que les permitan crecer y seguir sirviendo a la economía española".