S&P prevé una recuperación débil en Europa en 2010 y 2011, con España a la cola
Standard & Poor's (S&P) prevé una débil recuperación de la economía europea tanto este año como la primera mitad de 2011, y España se sitúa en cola de los grandes países, debido a un consumo que no va a despegar y a la persistencia de tensiones en las condiciones de crédito.
"Los que esperan un rápido restablecimiento del ritmo de crecimiento en Europa tendrán que ser pacientes", subraya S&P en un informe hecho público hoy, en el que calcula que en la zona euro, tras una caída del Producto Interior Bruto (PIB) del 4% en 2009, el ascenso se limitará al 1,2% este año y al 2% en 2010.
La situación será similar en el Reino Unido, con un incremento del PIB del 1% este ejercicio y un 2% el próximo, tras el descenso del 4,7% en 2009. Las peores perspectivas, entre las cinco mayores economías de la Unión Europea, son para España que, después de que la recesión le haya restado el 3,6% su PIB el pasado año, volverá a perder un 0,6% en 2010 (será el único con números rojos de este grupo) y sólo recuperará el 0,8% en 2011 (el menor crecimiento de los cinco).
La agencia de calificación augura un agravamiento este año del desempleo en toda la UE, con una tasa de desempleo que subirá al 10,7%, tras el 9,6% en 2009, antes de descender al 10% en 2011. España destaca todavía más en este área, con un nivel de desempleo que debería aumentar del 19% en 2009 al 21% este ejercicio, antes de volver al 19% en 2011.
Las razones de la fragilidad europea, según S&P, hay que buscarlas en primer lugar en la evolución del consumo, que durante 2009 bajó el 1% pese a los incentivos para la compra de vehículos, que como van a terminare van a conducir a un estancamiento tanto en la zona euro como en el Reino Unido en 2010, y a modestas alzas en 2011 del 1% y del 1,2%, respectivamente.
El otro punto negro son los créditos a los particulares y a las empresas, debido a que los bancos van a seguir reconstituyendo sus balances. En el extremo opuesto, el elemento más alentador es el repunte del comercio internacional, con un despegue del 7% previsto para este año, después del hundimiento del 12,7% en 2009.
También son positivos los movimientos de reducción de existencias de las empresas y los "signos de estabilización" en el mercado inmobiliario en el Reino Unido, Francia y Holanda, pero no en España, donde "la oferta supera a la demanda".
"El ritmo de caída del precio en España se ha estabilizado en los últimos meses en torno al -6% y las aprobaciones de créditos han empezado a crecer", constata S&P, que en todo caso augura "un prolongado periodo de ajuste de precios".