Vic acata el dictamen de la Abogacía del Estado y empadronará a los inmigrantes irregulares
La polémica por la negativa de la alcaldía de Vic (Barcelona) a empadronar inmigrantes irregulares no se cerró ayer, pese a la rectificación hecha pública por el consistorio. El alcalde de Vic, Josep María Vila d'Abadal, confirmó que acatará, aunque no la comparta, el dictamen de la Abogacía del Estado que considera improcedente negar el empadronamiento a inmigrantes en situación irregular. Acto seguido, el regidor reclamó al Ejecutivo más recursos para atender las necesidades de ese colectivo. "Vic no es xenófoba, sino pionera en modelo de integración y lo seguirá siendo, aunque para ello es necesario un orden legal", afirmó Vila d'Abadal, que recibió el respaldo de un numeroso grupo de vecinos en su comparecencia. El alcalde exigió que se ayude económicamente y de forma directa a los ayuntamientos para atender las necesidades de los inmigrantes en situación irregular.
Pocas horas después de la decisión adoptada en Vic, el consistorio de Almería fue el encargado de volver a abrir la caja de los truenos al anunciar que limitaba el empadronamiento de personas en las diferentes viviendas de la ciudad a 12 personas como máximo, "con el fin de evitar posibles pisos patera ocupados por inmigrantes". Desde el consistorio almeriense se justificó la decisión para evitar la aglomeración de ciudadanos extranjeros que no cuentan con permiso de residencia en España.
La disputa política fue aprovechada por el Partido Popular para cargar contra el Ejecutivo. El secretario general del PP de Cataluña, Jordi Cornet, criticó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "por derivar a los ayuntamientos su propio fracaso en el control de fronteras".
Por su parte, el alcalde de Madrid, el popular Alberto Ruiz-Gallardón, señaló que cualquier ayuntamiento que establezca un requisito añadido a lo que dictamine la ley "incurre en ilegalidad", en clara alusión a la negativa del ayuntamiento madrileño de Torrejón de Ardoz, gobernado por el PP, a empadronar a los turistas.