En busca de los 'templos' de la suerte
Todas las tradiciones tienen sus lugares de culto y la 'magia' del sorteo de la Lotería de Navidad ha favorecido la aparición de 'templos', algunos de ellos bastante rentables, dedicados al arte de dar esperanza, arreglar los maltrechos bolsillos y permitir algún que otro capricho.
Todos los establecimientos tienen su público, pero no todos consiguen despertar en estas fechas el mismo espíritu como las administraciones de lotería, que apuestan por engalanarse y mostrar todos sus trofeos (en forma de premio otorgado) para atraer las miradas y los bolsillos de los viandantes. Como en todo, algunas más que otras logran ser el centro de atención y, por tanto, las más buscadas.
¿Cómo encontrar esos templos consagrados al don de regalar millones en premios? Su fama les persigue y las colas a su puerta esperando el deseado boleto también. No hay datos firmes sobre cuál fue la primera administración de lotería en España, si bien podría situarse en Cádiz, donde el 4 de mayo de 1812 tuvo lugar el primer sorteo de Lotería de Nacional. Sin duda, uno de los establecimientos con más solera es Del Rosario, en Zaragoza. De las más de 4.000 administraciones de lotería que hay en toda España ésta tiene el número 5 en su puerta y las primeras pruebas documentales sobre ella datan de 1860. Mientras que Valdés en la Rambla de Barcelona lleva desde 1905 regalando suerte.
En Madrid se llevan la fama La Pajarita y Doña Manolita. La concesión de la primera de ellas se debió al Rey Alfonso XIII, quien permitió la apertura del local en la Puerta del Sol. Más presumida es la segunda, Doña Manolita situada en la Gran Vía y que se define así misma como 'la más importante y con más solera de España'. Las largas colas de personas esperando a sus puertas año tras año son un clásico que este año se ha vuelto a repetir diariamente desde principios de noviembre.
La historia de Doña Manolita es una muestra de innovación. "El año 1926, harta de que no correspondiese jamás a esta administración un premio que valiese la pena, hice cuatro viajes a Zaragoza, y en los cuatro tuve la suerte de ver a la Pilarica con su manto rojo, que es signo infalible de fortuna. Pedí unos números que se me ocurrieron sin saber por qué, los vendí en mi casa y el premio gordo de Navidad fue conmigo aquel año, siendo éste el comienzo de mi fama", aseguraba la lotera en una entrevista realizada en 1929 por la revista 'Crónica'.
Y a esa innovación es a la que volvió a recurrir décadas después, con más marketing y avances tecnológicos, Xavier Gabriel, propietario de La bruixa d'Or, para convertir su establecimiento de un pequeño pueblo de Lérida en una de las administraciones que más décimos vende año tras año y, por ende, que más premios de lotería da. Gabriel ha logrado colocar en el mapa a la localidad de Sort gracias a su apuesta por internet, si bien la razón de otorgar tantos premios está en su estrategia a la hora de adquirir buena parte de los 86.000 números del sorteo navideño, algo que no hacen otros establecimientos que optan por comprar la serie completa de varios números.
¿Crisis? Xavier Gabriel reconoce que los loteros se han visto afectados por la caída de las ventas desde 2008, aunque él prefiere ver este momento como "una oportunidad de para el despegue de cualquier negocio".
De las loteras a internet móvil
Conseguir un establecimiento en una calle principal ya no es sinónimo de vender más boletos. Por ello, las tradicionales loteras de la Puerta del Sol madrileña han dado paso a los sites, bien sea a través de los ordenadores o de internet móvil, con los que las administraciones logran incrementar su facturación, abrirse paso en nuevos negocios y acceder a un mayor público.
Comprar lotería por internet es una opción pero Gabriel lo tiene claro, las largas colas en las puertas de las administraciones "no se acabarán. La gente vive con ilusión y eso es lo que hace que acudan desde Canarias o alquilen un autobús para hacerse con unos números del sorteo después de esperar en la cola".
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