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Según Atlas Capital

La Bolsa española puede alcanzar los 14.000 puntos a comienzos de 2010

El principal indicador de la Bolsa española, el Ibex 35, puede alcanzar en los primeros meses del próximo año los 14.000 puntos, dada la enorme liquidez que circula por el mercado que las entidades financieras no necesitan, según la gestora privada Atlas Capital.

En un encuentro con periodistas, el director de inversiones de la firma, Ignacio Cantos, explicó que inevitablemente el dinero irá a la bolsa, una vez demostrado que los bancos disponen de la liquidez necesaria.

De este modo, el selectivo español, que ha "salvado el año", comenzará el próximo ejercicio al alza y pude sobrepasar 13.000 e incluso 14.000 puntos en los primeros meses de 2010.

No obstante, Cantos advirtió de la inevitable corrección, que se producirá a mediados de año cuando los tipos de interés del mercado monetario comiencen a reflejar la retirada de las medidas de estímulo que, previsiblemente, los bancos centrales llevarán a cabo entonces.

Según Ignacio Cantos, los bancos centrales mantendrán el precio del dinero estable el próximo año, pero los mercados monetarios se anticiparán a las subidas oficiales, que en cualquier caso se producirán antes en Estados Unidos que en Europa.

A partir de entonces, añadió, la corrección será inmediata, aunque situó el soporte del Ibex-35 en 10.800 puntos.

Asimismo, recordó una de las fortalezas del índice español, que es la gran exposición de algunas de sus mayores empresas a activos en mercados emergentes y, particularmente, en Latinoamérica.

En conjunto, los analistas de Atlas Capital señalaron que 2010 será "más complicado" que 2009 "más para los gestores que para los inversores", y se inclinaron por sectores no cíclicos y, en concreto, por activos de telecomunicaciones y empresas farmacéuticas.

En el contexto macroeconómico, los analistas estimaron un IPC estable en torno al 1,5 por ciento para la zona del euro, aunque en el caso de España el lastre del desempleo, que se mantendrá en torno al 18 o el 20 por ciento de la población activa hasta 2012, será uno de los factores que impedirá una recuperación del crecimiento.

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