Los bancos apuestan ahora por cerrar todos los sábados del año
BBVA parece que ha decidido apuntarse finalmente al cierre de oficinas los sábados. El próximo 19 de diciembre puede ser el último en que el banco abra sus puertas el penúltimo día de la semana. Santander y Popular ya han adoptado esta medida, mientras que Banco Sabadell ha comenzado a negociar.
Parecía que BBVA se iba a resistir pero finalmente puede cambiar de opinión y cerrar las puertas de sus 3.000 oficinas todos los sábados del año, lo que afecta a unos 28.000 trabajadores de la entidad.
El banco que preside Francisco González seguiría así los pasos de Santander, primero que firmó con los sindicatos la clausura de toda su red de sucursales el penúltimo día de la semana, y de Popular, que tras llegar a un acuerdo la semana pasada que se plasmará en un documento el próximo jueves, cerrará sus agencias para los clientes a partir de 2010.
Esta es una vieja reivindicación sindical de hace 26 años que ahora se puede conseguir de forma individual con los bancos, ya que no será hasta el convenio que se comenzará a negociar en 2011 cuando quede reflejado de forma colectiva.
Los sindicatos Comfia-CC OO y UGT explicaron ayer la predisposición de BBVA a llegar a un acuerdo antes de que termine el año, aunque fuentes del banco aseguran que no hay nada definitivo aún.
Pese a que no hay un pacto cerrado, la idea que manejan los sindicatos es que se firme un pacto el próximo día 17, explica el secretario general de CC OO en BBVA, Juan José Giner. De cumplirse esta previsión, el 19 de diciembre sería el último día en el que el segundo banco español abra sus puertas en sábado.
Si no se alcanza la citada firma en los próximos días, UGT ha demandado a la entidad que las oficinas de BBVA cierren los sábados 26 de diciembre y 2 de enero.
Fuentes sindicales aseguran que, una vez que BBVA plasme sobre el papel estos cierres, el resto de los bancos que aún no han llegado a un acuerdo, podrían adoptar la misma medida en los próximas semanas. Este es el caso de Sabadell, Pastor y Banesto.
En el caso de la entidad que preside José Oliu ya se comenzó a negociar estos cierres la semana pasada, aunque todavía no se ha constituido oficialmente la mesa negociadora. Los sindicatos esperan, no obstante, que se puede llegar a un acuerdo definitivo en breve.
En Banesto, filial de Santander, las conversaciones son más incipientes, razón por la que se prevé que se prolongue más la posible apertura de una mesa. Mientras que en Banco Pastor aún no se ha establecido ningún contacto con este fin. En Bankinter, Barclays, Deutsche Bank o Caixa Geral llevan desde hace años con sistemas más peculiares, con el cierre de oficinas los sábados, aunque en ciertos casos abren alguna tarde entre semana.
El convenio de banca establece el cierre de las sucursales del sector en verano, para reabrirse de octubre a abril. BBVA ya contaba desde hace unos cinco años con un sistema mixto. Atendían al público durante los sábados de estos meses en la mitad de su red.
Las cajas de ahorros llevan años abriendo sus sucursales sólo de lunes a viernes por la mañana, a excepción de los jueves, día en el que prolongan su jornada hasta la tarde.
Unas 700 prejubilaciones y 260 contrataciones
-BBVA tiene previsto ampliar el número de prejubilaciones previstas para este año que está a punto de finalizar. De las 350 estimadas inicialmente el número puede extenderse a unas 700 a 800 prejubilaciones voluntarias a partir de los 51 años de edad, aseguran fuentes sindicales. El pasado año fueron 2.000.-Compensación con más contrataciones. Eso es al menos el objetivo del banco, que pretende realizar el próximo año unos 260 contratos en prácticas, de los que habitualmente un 90% se queda definitivamente en la red comercial. Los contratos en prácticas en BBVA tienen una vigencia de un año, frente a los dos años de otras empresas. Tras este periodo o se rescinde el contrato en prácticas o se les hace fijos.-BBVA ha decidido ampliar un año más el programa de excedencias que puso en marcha a principios del presente año para los empleados que quieran ampliar sus estudios universitarios. Se espera que al cierre del ejercicio se hayan acogido a este plan unos 100 trabajadores, cifra muy por debajo de lo esperado.