El dueño de Ikea, el más rico residente en Suiza
Las 300 fortunas más grandes de Suiza totalizan 449.00 millones de francos suizos en 2009 (casi 300.000 millones de euros), según una evaluación difundida por la revista económica 'Bilan', que incluye en su clasificación a los extranjeros residentes en el país, siendo el más rico el dueño de Ikea, Ingvar Kamprad.
Esta cifra es 10.000 millones de francos inferior a la del año pasado, un descenso derivado de la crisis financiera mundial.
En 2007, la riqueza acumulada por ese conjunto de 300 fortunas había alcanzado un récord de 529.000 millones de francos.
A la cabeza de los más ricos está el fundador de Ikea, Ingvar Kamprad, cuyo patrimonio ronda los 36.000 millones de francos (en torno a 24.000 millones de euros).
El empresario sueco reside en el cantón de Vaud y ocupa desde hace ocho años el primer lugar de la lista de los más adinerados de la Confederación Helvética.
Le sigue la familia Hoffmann y Oeri, que controla parte importante del capital de la farmacéutica Roche, con entre 15.000 y 16.000 millones de francos (de 10.000 a 10.600 millones de euros).
Con 11.000 millones de francos (unos 7.300 millones de euros), figura en el tercer puesto la familia Bertarelli, que era propietaria de la biotecnológica Serono, compañía que vendió a la alemana Merck.
Según la publicación, el número de fortunas que superan los 1.000 millones de francos retrocedió de 138 en 2008 a 133 este año, lo que también es visto como una consecuencia de la crisis financiera.
Este último grupo reúne el 84 por ciento de la riqueza total acumulada de las 300 mayores fortunas.
En Ginebra, la familia de origen griego Latsis, con intereses en la banca y el transporte aéreo y marítimo, se mantiene como la fortuna más importante, con un estimado de 6.000 a 7.000 millones de francos (4.000 a 4.600 millones de euros), lo que supone 3.000 millones menos que el año pasado.
La familia Peugeot, residente en el cantón de Vaud, también sufrió una fuerte depreciación de su fortuna, que pasó a ser de 2.000 a 3.000 millones de francos.
Según "Bilan", las presiones que ejerce el fisco de Francia sobre las fortunas en ese país ha llevado a varios ricos a "refugiarse" en Suiza, que albergaría 30 fortunas galas superiores a los 100 millones de francos, de las que una docena supera el millar de francos.
A la cabeza de ese grupo, aparecen las familias francesas Wertheimer (Chanel), Castel (vinos, cerveza y agua), Primat (servicios petroleros), Peugeot (automóviles) y Rotschild (finanzas).