Ocaña no descarta que el déficit supere el 9,5% en 2009
El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, no descarta que el déficit del conjunto de las administraciones públicas en 2009 supere el 9,5%, como prevé el último cuadro macroeconómico, y prevé eliminar los estímulos de gasto para paliar la crisis en 2011.
Durante un desayuno informativo organizado por la Asociación de la Prensa de Información Económica (APIE), Ocaña indicó que el déficit del Estado "no será inferior al 9,5% del PIB en 2009". Según concretó, estas "reservas" a la hora de dar una cifra final se basan en la posibilidad de que alguna comunidad autónoma exceda sus previsiones de déficit para este año.
"No todas las comunidades gestionan de la misma manera ni acabarán el año con el mismo déficit", indicó antes de pedir a los gobiernos autonómicos que "se tomen el problema más en serio".
Sea como fuere, Ocaña reconoció que el déficit, pese a que no contará con problemas de financiación, es "insostenible", por lo que "hay que empezar a reducirlo combinando una mejora de los ingresos y una reducción del gasto".
No más subidas de impuestos
Por el lado de los ingresos, el secretario de Estado de Hacienda indicó que el Gobierno ya ha tomado la "dura y difícil" decisión de subir impuestos y añadió que "no se está pensando en ninguna otra subida", ni siquiera en fiscalidad verde, ya que ésta debe marchar "de la mano" de la UE.
Sin embargo, indicó que es preciso seguir avanzando en el recorte del gasto. En este punto, recordó que actualmente la preocupación debe ser, ya no frenar la crisis, sino preparar una estrategia de salida, esto es, la retirada de los estímulos fiscales.
Al respecto, Ocaña precisó que, teniendo en cuenta que las medidas discrecionales contra la crisis suponen hasta cuatro puntos porcentuales del déficit, habrá que ir retirando paulatinamente estos estímulos en función, entre otras cosas, del comportamiento del paro, pero con "la idea de que sean innecesarios en 2011".
Según recordó, ya se han dado pasos en esta dirección, puesto que el coste de estas medidas se elevó a los 11.000 millones de euros, y para 2010 se ha reducido a 5.000 millones, la mitad.
Por otro lado, Ocaña indicó que además de los cuatro puntos que se recortarían de esta manera, el resto del déficit, de carácter estructural, debe reducirse a partir de una plan de austeridad que ya contempla la Ley de Economía Sostenible.
Ahora bien, respondió a aquellos que piden recortes de gasto corriente por la vía de eliminación de ministerios, que esta opción tiene más que ver con la organización del Gobierno y menos con la austeridad, y recordó que los sueldos de los altos cargos ya llevan congelados dos años. Para cerrar la cuestión, Ocaña aseguró que España está en condiciones de reducir el déficit al 3% en 2012.
Otros temas pendientes
Por otro lado, Ocaña indicó que la Ley de Economía Sostenible dotará de herramientas a las empresas para que puedan reclamar "con la ley en la mano" las deudas impagadas de los ayuntamientos, aunque reconoció que estos esfuerzos "no necesariamente aseguran que se vayan a pagar las deudas".
Preguntado por el funcionamiento de la línea del Instituto de Crédito Oficial (ICO) que perseguía aliviar esta situación, Ocaña también reconoció que ha funcionado "relativamente mal".
Por otro lado, indicó que la Ley de Economía Sostenible también prevé mayores esfuerzos en el control del fraude fiscal. En este punto, quiso dejar claro que no existe un "fraude desmesurado", del mismo modo que, aunque reconoció que las crisis pueden desembocar en un incremento de la economía sumergida, "este efecto no es significativo".
Por último, el secretario de Estado de Hacienda afirmó que el problema del flujo crediticio es hoy "menor" que hace un año, ya que "en algún grado se ha reestablecido" gracias a las medidas puestas en marcha por el Gobierno. "El tema se ha aliviado de forma bastante notable", sentenció.