El Gobierno británico se asegura el derecho de veto sobre los 'bonus' de RBS
El Tesoro británico se ha asegurado el control sobre la partida destinada al pago de primas por parte de Royal Bank of Scotland (RBS), participado en un 70% por el Estado, como consecuencia de la participación de la entidad en el programa de garantía de activos diseñado por la Hacienda de Reino Unido, según reconoció el banco.
A este respecto, el presidente de RBS, Philip Hampton, admitió en una carta dirigida a los accionistas de la entidad que los términos acordados para acceder al citado plan de garantía de activos son "muy restrictivas" en varios aspectos.
De hecho, Hampton reconoció que el Tesoro había impuesto la condición de que RBS otorgara al Gobierno la capacidad de decidir sobre "la cuantía y la forma" de la partida correspondiente al pago de 'bonus' para 2009, que será ejercicido a través de UKFI, el vehículo financiero que gestiona los intereses públicos en la entidad.
A este respecto, el presidente del banco señaló que el consejo de RBS accedió a ello únicamente porque formaba parte esencial de los acuerdos generales referidos a la refinanciación de la entidad y a su participación en el programa de garantía de activos.
No obstante, Hampton admitió que este derecho de veto "puede afectar negativamente a la capacidad de RBS de atraer o conservar a empleados clave", lo que implica una "significativa desventaja competitiva" del banco frente a sus competidores a la vez que puede incrementar los riesgos para la entidad al debilitar la capacidad de sus gestores para hacerles frente.
Por otro lado, la entidad informó de que ha asumido una serie de compromisos entre enero de 2010 y diciembre de 2013 que situarán al banco a la vanguardia de la implementación de las recomendaciones del G-20, así como del código de remuneraciones presentado por la Autoridad de Servicios Financieros (FSA) y cualquier propuesta derivada del informe sobre el sector contenida en el denominado 'Informe Walker'.
El diario británico The Guardian apunta que, aunque la entidad se haya referido únicamente a los 'bonus' de 2009, el Tesoro mantendrá este derecho de veto durante todo el tiempo en el que RBS requiera las garantías del Gobierno.
El Gobierno elevará su paricipación hasta el 84,4%
RBS suscribió el pasado 27 de noviembre el acuerdo para tomar parte en el programa de garantía de activos diseñado por el Tesoro británico que todavía debe ser ratificado por sus accionistas en junta general extraordinaria el próximo 15 de diciembre y que, entre otras cosas, elevará la participación del Gobierno hasta el 84,4% del accionariado del banco..
El banco escocés precisó que ha sido revisada la condición pactada el pasado 3 de noviembre que hacía referencia a la obligación de la entidad de reducir sus activos en 60.000 millones de libras (66.000 millones de euros) si los fondos de su balance a 31 de diciembre de 2013 no alcanzan el objetivo fijado en un 10% ó más.
En su lugar, se ha acordado, pendiente de la aprobación de la UE, que esta reducción de activos sea de 30.000 millones de libras ( 33.000 millones de euros).
El acuerdo alcanzado con el Tesoro el pasado 3 de noviembre suponía una reducción del 13,2% del importe conjunto de los activos objeto de las citadas garantías, hasta 282.000 millones de libras (312.166 millones de euros), mientras que se elevó a 60.000 millones de libras (66.416 millones de euros) el umbral de pérdidas asumidas inicialmente por el banco a partir del cual el Tesoro se hará cargo del 90% de los 'números rojos'.
Asimismo, el banco y el Tesoro pactaron reducir las comisiones que deberá abonar RBS por participar en el programa, que pasarán a ser de 700 millones de libras anuales (775 millones de euros) entre 2009 y 2011 para posteriormente bajar a 500 millones de libras (554 millones de euros), en contraste con la comisión de 6.500 millones de libras (7.197 millones de euros) fijada inicialmente.
Además, en el marco de dicho acuerdo, el Estado realizará una nueva inyección de capital en el banco por importe de 25.500 millones de libras (28.223 millones de euros) mediante la suscripción de acciones convertibles tipo B que serán emitidas antes de final de año. RBS recibió el compromiso del Tesoro para suscribir hasta 8.000 millones de libras adicionales en acciones convertibles tipo B en el caso de que el ratio de solvencia Tier 1 de la entidad bajará del 5%.
De este modo, el Gobierno pasará a controlar el 84,4% del accionariado de RBS, frente al 70% que controla actualmente, en lo que será el rescate bancario más oneroso hasta la fecha. ÿ