Las ingenierías podrán participar en el nuevo fondo de inversión local
El nuevo Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local 2010 contempla que no sólo se podrá financiar la ejecución de las obras que así lo soliciten, sino que también podrá costearse la elaboración del proyecto. Las ingenierías se aseguran así una parte de los 5.000 millones de euros de inversión prevista.
La parálisis que sufre el sector de la construcción en general y el de la obra civil en particular preocupa y de qué manera a las empresas de ingeniería españolas, que además vieron cómo quedaron excluidas del primer fondo estatal de inversión local, dotado con 8.000 millones de euros.
En esta ocasión, y gracias a las gestiones efectuadas por la patronal del sector, Tecniberia, estas empresas se han garantizado su participación en la inversión de 5.000 millones prevista para 2010, según confirmó a CincoDías el presidente de esta asociación, José Luis González Vallvé.
Más innovación
El nuevo fondo priorizará, según el Gobierno, los proyectos que contemplen un plus de innovación y aumenten el gasto en I+D+i, por lo que es ahí donde entra el papel determinante de las ingenierías.
"El primer fondo local quizás empleó criterios muy localistas y no entró en detalles en el apartado correspondiente a la definición de la obra", explica González Vallvé. Ahora, en su reedición se dice que las ingenierías deberán entrar en el desarrollo de los proyectos. Especifica que "si la redacción del proyecto y la dirección de obras se contrata externamente de forma separada al contrato de obras, podrá también financiarse con cargo al fondo", según la guía explicativa del real decreto que ha editado la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).
Gracias a esta modificación, las ingenierías podrán participar en una tarta que cada vez tiene que repartirse entre más agentes. Y es que la actividad constructora se ha desplomado y mientras no se impulse toda la obra proyectada por el Ministerio de Fomento, las ingenierías están abocadas a buscar otros mercados y a diversificar más sus proyectos.
"Somos conscientes de que no nos queda más remedio que acudir a más concursos internacionales, como el que acaba de ganar Getinsa en Vietnam, y, al tiempo, convencer a las autoridades de que exportar ya es innovar, por lo que las empresas que consiguen salir al exterior, merecen todo el apoyo de las distintas administraciones", dice el presidente de Tecniberia.
Y en cuanto a diversificar, desde esta patronal se muestran dispuestos a participar en la implantación del coche eléctrico y a orientar su actividad hacia la llamada ingeniería verde. De hecho, resaltan entre las iniciativas adoptadas recientemente la puesta en marcha de un nuevo think tank sobre innovación aplicada al ámbito del agua y los servicios.
Al margen de la merma de proyectos, las ingenierías, como las constructoras, están preocupadas por el aumento imparable de los modificados en las obras. Y aunque el Gobierno ha anunciado que pondrá coto a esta práctica por la que las constructoras pujan a la baja en los concursos y luego obtienen el visto bueno a modificados una vez iniciada la obra, Tecniberia asegura que apostar por la ingeniería resolvería los problemas técnicos y presupuestarios que suelen conllevar estas desviaciones.
"Tenemos que convencer a la sociedad de la importancia de contar con un proyecto bien hecho", asegura González Vallvé. Las cifras que maneja Tecniberia demuestran que cuanto más se invierte en el diseño de un proyecto, más se reduce el coste de construcción y de mantenimiento posterior de la infraestructura (ver gráfico).
Gastar más en diseño minimiza los modificados
Por cada 30.000 millones de euros de obra pública, aproximadamente unos 10.000 millones financian modificados. Este es el peso, aproximadamente de un tercio, que tienen los sobrecostes que acompañan a casi todos los proyectos de infraestructuras públicas, según calcula Tecniberia. Según sus estimaciones, si se gastaran 500 millones en ingeniería, (el 1,6% de esos 30.000 millones) se lograría evitar la mitad de los modificados (5.000 millones). En España, se destina de media el 2% del coste total del proyecto a su elaboración, mientras lo habitual es que los países más avanzados dediquen entre el 5% y el 10% del precio de adjudicación."Es cierto que es un caso extremo, pero lo suficientemente ilustrativo. En un proyecto de hace años de una presa, apenas se gastó e 0,25% en la redacción del proyecto. Pues bien, el coste de la obra se disparó de los 3.000 millones iniciales a más de 13.000", cuentan en esta patronal.Además de esta mayor inversión inicial, Tecniberia reclama más protagonismo para el ingeniero durante toda la obra y que los concursos no sólo primen la oferta económica. "Se obtendría una mayor calidad. Es algo que deberían plantearse las administraciones", recalca González Vallvé. "No se trata de gastar más, sino de hacerlo mejor, de una forma más eficiente", añade. Sobre la reforma que planea Fomento para frenar los modificados, aluden al toque de atención de la UE, diciendo que en algunos casos para hacer el modificado habrá que convocar otro concurso.