España y Bruselas chocan por los datos de desarrollo de la banda ancha
El Gobierno español sigue peleado con cada informe que sale a la luz acompañado de cifras que constatan el subdesarrollo nacional en banda ancha. El último procede de Bruselas, se publicó la semana pasada y dice que España está por debajo de la media europea en penetración de banda ancha fija y móvil, y en alta velocidad de acceso. Ros aseguró el viernes que las cifras muestran lo contrario.
España ha dado algunos pasos para mejorar la posición local en las comparativas internacionales de desarrollo tecnológico. Los planes que se han aplicado los últimos años para extender la banda ancha a zonas rurales son un ejemplo de ello, al igual que la iniciativa por la que en 2011 el servicio universal incluirá la obligación de llevar a cualquier sitio donde un usuario lo requiera un acceso a internet de un mega de velocidad.
Pero el resto de los países comunitarios también está incentivando la banda ancha. Empezaron antes y su crecimiento es superior, así que la distancia de España con la media europea a veces, incluso, se agranda.
El resultado es que la posición nacional en las comparativas no sale favorecida, como se vio la semana pasada con la publicación del informe semestral de la Comisión Europea sobre la situación de la banda ancha. España está por debajo de la media en penetración del acceso a internet a alta velocidad tanto fijo como móvil, va por detrás en crecimiento y no está en la zona superior por capacidad de las líneas.
El secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros, y otros miembros del Ministerio de Industria llevan tiempo intentando cuestionar estos informes, sobre todo los que se refieren a precios y destacan que España es más cara que la media, como han hecho los de la Comisión Europea y de la OCDE. El viernes, el secretario de Estado usó otra estrategia: tomar los datos del informe comunitario donde más favorecida ha salido la banda ancha española.
Así, Ros destacó ante el Senado que España está entre los países líderes de la UE en velocidad de la banda ancha. El alto cargo señaló que el 88% de las líneas nacionales va a dos o más megas, frente a la media del 81% de la UE, según recoge Europa Press.
Esos datos están en el informe de la comisión, pero Bruselas los presenta de otra manera. Es cierto que el porcentaje de líneas que va a dos megas o más es superior a la media, pero sólo porque España gana en la velocidad intermedia. Frente al 65,5% de los europeos que navega entre dos y menos de diez megas, la proporción nacional es del 74,5%. Y eso significa que España está por debajo de la media en la alta velocidad. Frente al 15,5% de los europeos que disfruta de 10 megas o más en su conexión, en territorio español sólo el 13,3% lo tiene.
El alto cargo de Ministerio de Industria también aludió al liderazgo nacional en penetración de las líneas de banda ancha. En ese aspecto los datos de la Comisión Europea son bastante claros: España está por debajo de la media.
Sucede en banda ancha fija, donde la media de penetración comunitaria es del 23,9% y la española, del 20,7%. Pero es que los datos del primer semestre del año muestran un retroceso, ya que a finales de 2008 sólo dos países separaban a España de la media; con los datos de cierre de junio son cuatro las naciones que tendrían que adelantarse para llegar al porcentaje medio en la tabla.
Lo mismo sucede con la banda ancha móvil, donde la media nacional está un punto por debajo de la comunitaria y muy lejos de los países que están en los primeros puestos.
Pero quizá el dato más preocupante es el de crecimiento. Bruselas ha medido el número de líneas de banda ancha nuevas al día por cada 100 habitantes entre julio de 2008 y el mismo mes de 2009. De 27 países, España es el quinto que menos crece.
Ex monopolios
Uno de los parámetros que mide Bruselas y en el que España está por encima de la media es en la cuota de mercado de banda ancha fija de los ex monopolios. Telefónica tiene el 55,6%, según la CE, cuando la media es del 45%. Sólo cinco países tienen una proporción más alta.