Ocaña dice que España sigue confiando en reducir el déficit al 3% en 2012
El secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, aseguró hoy que España sigue confiando en reducir el déficit al 3% en el año 2012, aunque tendrá en cuenta el año de prórroga concedido por la Comisión Europea.
Así lo puso de manifiesto Ocaña durante su comparecencia en la Comisión de Presupuestos del Congreso, donde explicó que el compromiso del país es reequilibrar las finanzas públicas de cara al año 2012, para lo que se han elaborado los planes de reconducción.
En declaraciones a los medios de comunicación tras la comparecencia, explicó que esto no supone "rechazar" la prórroga de un año concedida por la Comisión Europea, que ya se verá cómo se utiliza. "De aquí a 2012 habrá que seguir consolidando gastos para que el déficit se reduzca", añadió.
Durante su intervención en la Comisión, Ocaña reiteró una vez más que el déficit que se ha acumulado en los dos últimos años ha sido "buscado" como mecanismo para hacer frente al ajuste económico, al tiempo que aseguró que los datos se ajustan a las previsiones del Gobierno, ya que no se esperan sorpresas de aquí al cierre del año ni en los gastos ni en los ingresos.
En este sentido, aseguró que el Gobierno sigue manteniendo sus últimas previsiones, que contemplan un déficit público del 9,5% al cierre de 2009, aunque admitió que habrá que ver si las comunidades cumplen o no con el límite que les ha marcado el Gobierno.
En cuanto a la parte del déficit que se debe a las medidas implementadas por el Ejecutivo, Ocaña aseguró que las iniciativas suponen unos 22.290 millones de euros en términos de gasto y unos 7.400 millones en cuanto a los ingresos que se dejarán de percibir, lo que supone un cifra cercana a los 30.000 millones.
Sobre la subida de IVA, Ocaña explicó que fue las Navidades pasadas cuando se planteó por primera vez a nivel interno la posibilidad de subir los impuestos más adelante, justo en el mismo momento en el que lo empezaron a plantear algunas organizaciones como la CEOE. "Curiosamente parecía que era agua bendita", señaló.
En este sentido, explicó que el Gobierno nunca pensó en subir el IVA mientras la economía siguiera cayendo, motivo por el que no se hizo pública esa reflexión interna hasta este mismo año y por el que el cambio impositivo no entrará en vigor hasta el mes de julio de 2010, dando tiempo así a que la economía se recupere.
Sin cambios para la subida del IVA
"Nadie ha sido más cuidadoso que nosotros en elegir el momento adecuado", subrayó el secretario de Estado, quien criticó al Partido Popular por el hecho de que la misma iniciativa les parezca "bien o mal" por razones de oportunidad.
En declaraciones a los medios, Ocaña recordó que la fecha de la subida da un margen de tres trimestres para que la economía pueda tocar fondo y para que se inicie la recuperación. "Un margen más que suficiente para que no nos planteemos un escenario alternativo", subrayó.
Sobre el posible impacto de una subida de tipos en la evolución de la economía española, Ocaña admitió que, si esto ocurre, al país le costará más financiar su deuda, aunque aseguró que la principal preocupación del Ejecutivo en este sentido es controlar el aumento de esta variable, no como problema de hoy, sino como un posible problema del futuro.
"Somos más que sensibles a los problemas que se derivan de la deuda", señaló Ocaña, quien admitió que superará el 50% al cierre de este año, aunque, a su parecer, sigue "muy por debajo" de la ratio deuda/PIB de otros países de la zona euro y con niveles "moderados, asumibles y razonables".
Durante las réplicas, el diputado 'popular' Vicente Martínez Pujalte consideró que las cosas se están haciendo "mal" y criticó al Gobierno por no hacer autocrítica y traer al Congreso unos Presupuestos que "no se ajustan a la realidad". "Hemos pasado del equilibrio al déficit excesivo con una rapidez pasmosa", señaló, tras considerar que esto no habría ocurrido si el Ejecutivo hubiera presupuestado "mejor".