Las rurales valencianas en fusión recurren al fondo de apoyo a la banca
Los 20 integrantes del Grupo Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM) planean solicitar respaldo del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para su integración. Está previsto que el Banco de España reciba el reglamento del grupo en diciembre.
Las cooperativas de crédito también aprovecharán el fondo de apoyo a la banca en sus procesos de integración. El Grupo Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM) está interesado en recurrir a este respaldo público para agilizar su constitución. "Nos vendría muy bien porque nos ayudaría a mejorar los ratios de liquidez y solvencia", explican fuentes próximas a esta iniciativa. "Aún así, es un tema que aún no se ha comenzado a gestionar ante el Banco de España".
La creación del Grupo CRM fue anunciada por Ruralcaja y otras 14 rurales de la Comunidad Valenciana el pasado 31 de junio. Desde entonces, cinco entidades más de la región se han sumado al proyecto, que ya reúne 12.196 millones de euros en activos, 634 oficinas y 2.687 empleados.
La iniciativa prevé la consolidación de balances de todos los socios en torno a Ruralcaja, que actuaría como cabecera y portavoz.
Fuentes próximas a CRM señalan que el reglamento del grupo cooperativo ya ha sido consensuado por los directores generales de las 20 cajas socias. Queda pendiente, pues, que los respectivos presidentes otorguen su visto bueno al documento y éste se remita al Banco de España. El escrito debería depositarse en la sede del supervisor a finales de diciembre.
Los involucrados han constituido seis grupos que, con carácter semanal, se reúnen para analizar los pasos necesarios para culminar integración. Así, se trabaja sobre los sistemas informáticos, recursos humanos, mercados de capitales y tesorería, organización y servicios centrales, control de riesgos y actividad comercial. Tras meses de trabajo, los miembros de CRM ya han redactado, por ejemplo, sus manuales de riesgos y disponen de un catálogo de productos conjunto. El objetivo es que el grupo esté plenamente operativo el 30 de junio de 2010.
Solapamientos mínimos
Fuentes conocedoras de la iniciativa señalan que la formación de CRM no implicará importantes ajustes de plantilla al no existir apenas solapamiento de oficinas entre los socios. "Las duplicidades son mínimas. En todo caso, habrá que formar unos servicios centrales más fuertes", aclaran.
La constitución del Grupo CRM no es el único refuerzo de vínculos que se da en el sector cooperativo. Actualmente, hay dos sistemas institucionales de protección (SIP) o fusiones virtuales en proceso de constitución. Una está asesorado por AFI y reúne a 30 rurales locales y comarcales. Las firmas de mayor tamaño de la Asociación Española de Cajas Rurales (AECR) -entre las que están Ruralcaja, Navarra, Sur y Granada- lideran otra iniciativa de la mano de la consultora Management Solutions (MSO) y el bufete Garrigues. Los integrantes de CRM tienen la intención de integrarse en este último SIP.
Cajamar creó en primavera un grupo cooperativo propio con tres rurales valencianas y espera recibir el visto bueno de las autoridades en las próximas semanas. Su grupo, que no planea recurrir al FROB, estará operativo en febrero.
Ventajas de los 20 socios al agruparse
La creación de un grupo cooperativo conlleva varias ventajas:
Economías de escala derivadas de un mayor tamaño que permiten mejorar la organización mediante una reducción significativa de los costes operativos y una mejora de la eficiencia.
Un rating único para los 20 socios al tiempo que se mantiene la personalidad jurídica independiente de cada una de las cajas rurales.
Financiación más accesible, tanto en los mercados minoristas como mayoristas, que permite a las cooperativas que se integran en CRM prestar nuevos y mejores servicios a sus clientes, y amplía su campo de acción a proyectos de más calado.
Integración en el SIP que diseñan los socios de más peso del Grupo Caja Rural, con el asesoramiento del bufete Garrigues y de la consultora MSO.
Desarrollo profesional más amplio para los empleados de las cajas socias. La mayor dimensión del grupo facilitará las posibilidades de promoción y dará más oportunidades de formación.