_
_
_
_

El momento justo, la oportunidad precisa

Uno de los momentos más recomendables para ver un castañar es precisamente ahora. Y un sitio para hacerlo es Puerto de Béjar (Salamanca). Un increíble espectáculo de la naturaleza. Una acción precisa, en un momento preciso. De alguna manera, el momento actual representa una ventana de oportunidades para las empresas financieras. Un poco al estilo de la visita a Puerto de Béjar, pero en el mundo de la gestión empresarial. Al menos en lo que se refiere a la posibilidad de dimensionar de forma correcta las actividades de la misma.

En el caso del sector financiero (asesoramiento, gestión, intermediación,..), la necesidad se acentúa. El desapalancamiento de las familias y empresas está dando como resultado un negocio presente y futuro más liviano desde el punto de vista de los ingresos; sin embargo, las estructuras de costes no se han movido, tomen como ejemplo el mundo de la gestión de activos y los datos de Inverco la asociación que agrupa a las instituciones de inversión colectiva. La supervivencia de determinados jugadores está en juego. Cuando hablamos de ello, pareciera que sólo la vía de las fusiones y el tamaño son válidas para asegurar el futuro. Ello dejaría a muchas empresas en una difícil solución. Existe una vía adicional que muchas entidades han empezado a explorar: outsourcing. Una suerte de deslocalización de tareas que no sean la esencia del negocio.

Centrar un negocio financiero en pocas tareas (especialización) y hacerse con un "nicho" es posible gracias a las posibilidades que el outsourcing ofrece. No hay que ser bueno en todo; basta con tener una idea. En finanzas ya se puede contar son superestructuras de outsourcing: las clásicas de depositaría o de back office; pero también motores transaccionales, operativa bancaria, frontal web, formación y apoyo a redes propias. La tendencia es clara. Dedicar los esfuerzos y recursos a la tarea de valor añadido que se domine: gestión del cliente; ceder el proceso industrial a un tercero especializado. Aprovechen la oportunidad; vayan a Puerto de Béjar.

Juan Luis García Alejo. Director de análisis de Inversis

Archivado En

_
_