La receta alemana contra el paro no triunfa en España
El ERE de reducción de jornada afecta a 16.000 empleados
España ya aplica algo parecido a lo que en Alemania denominan Kurzarbeit, un sistema que permite a las empresas germanas reducir la jornada laboral sin que afecte al salario de su plantilla, ya que el Estado compensa económicamente a los empleados por las horas no trabajadas. Esta fórmula, que desde España algunos ven como la panacea al problema del paro, permite entender, en parte, por qué el empleo alemán no ha sucumbido a la virulenta crisis económica.
Sin embargo, en España, ya existe algo parecido al Kurzarbeit: los ERE de reducción temporal de jornada, que hasta agosto, han afectado a 16.000 empleados, sólo el 4% del total de trabajadores que han sufrido un ERE en 2009. Estos empleados recortan su jornada laboral y su sueldo y tienen derecho a cobrar la prestación por desempleo en proporción a las horas que dejan de trabajar.
Sin embargo, la legislación es bastante restrictiva. En primer lugar, sólo en el marco de un ERE las empresas pueden aplicar esta medida, lo que en la práctica supone cerrar la puerta a las pymes, las principales destructoras de empleo. Además, la reducción de jornada debe ser, como mínimo del 33%, acompañada de una reducción salarial equivalente. Por otra parte, como recordó ayer el secretario general de UGT, Cándido Méndez, el peso del sector industrial en la economía alemana es mucho mayor que en España.
La fórmula germana no se adecúa al sector servicios y de la construcción
Los ERE de reducción de jornada se adaptan bien en la industria, donde las oscilaciones de producción son habituales y pronunciadas. Por ejemplo, permiten a una fábrica automovilística adecuarse a los flujos de demanda sin necesidad de acometer despidos. El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, reconoció ayer que el modelo alemán es difícilmente trasladable "a la construcción y sector servicios".
"En España existe esta figura Kurzarbeit pero no se utiliza porque es más fácil no renovar los contratos temporales que hacer el esfuerzo de organizar el trabajo de otra manera en las empresa", clamó el secretario general de Comisiones Obreras.
Ya sea por la alta temporalidad del mercado laboral, por el desconocimiento de las empresas o por las características de la economía española, lo cierto es que los ERE de reducción de jornada son residuales. La inmensa mayoría de empresas opta por los ERE de suspensión, en los que el empleado abandona temporalmente -cuatro meses de media- el trabajo y, mientras dura la inactividad, cobra la prestación por desempleo.
Además, en España, aquellos trabajadores en paro que logren un empleo a tiempo parcial, pueden seguir, si lo reclaman, cobrando parte de la prestación por desempleo.
La medida irrumpe en el diálogo social
La reducción de la jornada laboral y el ingreso de la prestación por desempleo es perfectamente compatible, sobre todo en el sector de la industria, aseguró ayer en el Congreso el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, quien abordó esta iniciativa con la vicepresidenta segunda, Elena Salgado. Corbacho planteó la posibilidad de que el llamado modelo alemán sea estudiado con empresarios y sindicatos al inicio de la nueva ronda que se abrirá en breve del diálogo social.El objetivo será, en cualquier caso, evitar que el ajuste de la crisis se haga sólo sobre las plantillas de las empresas, pues el despido debe ser, en opinión de Corbacho, "la última opción". Esta práctica es utilizada en Alemania por millón y medio de trabajadores y, según Trabajo, tendría coste neutro para las arcas del Estado.El más entusiasta con la idea es el secretario general de Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, que calculó que la aplicación del Kurzarbeit germano en España salvaría 450.000 empleos. CC OO propondrá en la mesa de negociación que la posibilidad de acogerse a una reducción de jornada con compensaciones públicas por la pérdida de poder adquisitivo no se limite sólo a los ERE. Además, pedirán que el modelo se financie con partidas independientes a la Seguridad Social. Así, los empleados beneficiados no verían reducida la duración de la prestación por desempleo a la que tienen derecho."La medida tiene un gran potencial y hay que mirarla con mucho cariño" apuntó Toxo, aunque reconoció que precisaría de algún "ajuste" y de "una mayor competencia de la negociación colectiva" para adaptarla con éxito en España.
Tipos de ERE
Tres modelos-De extinción: el trabajador es despedido.-De suspensión: el empleado deja el trabajo temporalmente.-De reducción: se recorta, como mínimo un 33%, la jornada laboral y el salario de la plantilla.