La teoría del sentimiento contrario prevé alzas
Las siglas AAII pertenecen a la American Association of Individual Investors, una asociación de inversores particulares, no institucionales, a los que se les formula la siguiente pregunta: ¿cuál cree que va a ser la dirección de los mercados en los próximos seis meses? Tienen que responder: alcista, neutral o bajista. Así se obtiene el porcentaje de los tres supuestos y se publica cada semana (www.aaii.com).
Se trata de un indicador muy fiable de sentimiento contrario, ya que se considera que los inversores individuales van con el pie cambiado y no suelen acertar la tendencia, y funciona muy bien en las lecturas extremas, cuando existe un gran número de alcistas o lo contrario. En los mínimos de marzo, la lectura fue del 70% de inversores pesimistas, la más alta desde la creación del indicador, Los particulares habían arrojado la toalla, y se produjo una de las mayores señales de compra de los últimos años, con el mayor rebote en ocho décadas.
A mediados de julio, la lectura fue de casi un 55% de bajistas, provocando que la clásica bajada de verano no se produjera. La semana pasada, salió publicado un ratio levemente superior, pero aún con menos alcistas que dicha semana de julio, y también después de una corrección, lo que nos enciende otra vez la luz de alerta. Da la sensación de que con últimas bajadas, inferiores al 10% en las principales Bolsas, es cuando le ha entrado el miedo al particular, que prevé un recorte.
Considerando este año tremendamente difícil en el ámbito de la gestión de fondos de inversión, en el que hubiera sido más útil la carrera de Psicología que la de Económicas, la lectura de este indicador junto con la estacionalidad en la que nos encontramos, tradicionalmente alcista, nos hace pensar en una aproximación a los máximos anuales y su posible rotura, como objetivo, antes de que finalice el año.
Ricard Torrella. Consejero delegado de Gesinter