Caser compra el 50% de los seguros de vida de Caixanova
Caser cerró el viernes un acuerdo por el que se hace con la mitad de los seguros de vida de Caixanova y su filial Banco Gallego. La entidad madrileña ha desembolsado cerca de 120 millones de euros.
La actividad corporativa recobra su pulso en el sector asegurador. Si el pasado junio CNP anunció la adquisición del 50% del negocio de vida de Barclays en el sur de Europa, el viernes fue Caser quien movió ficha. Se quiebra así la parálisis corporativa iniciada el pasado otoño a raíz de la quiebra de Lehman Brothers.
La aseguradora madrileña ha desembolsado entre 115 y 120 millones de euros por la mitad del negocio de vida de Caixanova y su filial Banco Gallego, según fuentes del sector conocedoras de la transacción. El acuerdo fue suscrito ayer en Madrid por el director general de Caser, Ignacio Eyries, y por su homólogo de la entidad gallega, José Luis Pego. Nomura ha actuado como asesor de la primera entidad y BNP Paribas ha dado servicio a Caixanova.
Los principales accionistas de Caser son Ibercaja (11,95%), las mutuas francesas Maaf (10%) y Le Mans Conseil (10%). El 68,05% restante de su capital está en manos de 36 cajas de ahorro en porcentajes que oscilan desde el 0,01% al 8%. Esta vinculación, sin embargo, no ha sido lo suficientemente sólida para evitar que muchos de sus partícipes hayan suscrito alianzas con aseguradoras rivales como Aviva, Aegon, Mapfre, Zurich o Reale a lo largo de la última década tanto en el negocio de ahorro y riesgo, como en el de seguros generales.
Con el fin de parar esta sangría, Caser se ha animado a firmar alianzas preferentes. Dentro de esta tendencia se encuadran sus pactos con Cajasol, Caja Canarias, Caixa Manresa o, sin ir más lejos, el recién suscrito con Caixanova. Fuentes del sector apuntan que la entidad se encuentra actualmente en negociaciones con la balear Sa Nostra.
Al contrario que sus competidores, la aseguradora madrileña no suele hacer públicos sus pactos para evitar fricciones entre sus accionistas puesto que en la calle son competidores.
De hecho, fue Caixanova quien el viernes remitió una nota a la CNMV. En ella informaba que involucrará su fuerza de ventas (586 oficinas de la caja y 204 de Banco Gallego) a la nueva joint venture. Mientras, Caser aportará su experiencia en el desarrollo y gestión de seguros.
La filial conjunta de Caixanova y Caser venderá seguros de vida ahorro y riesgo, planes de pensiones y seguros de dependencia. En virtud del plan de negocio pactado entre las partes las primas emitidas en el quinto año por seguros de vida ascenderán a 270 millones de euros y el patrimonio gestionado de planes de pensiones superará los 460 millones de euros.
Movimiento defensivo
"Caser ha sabido aprovechar las dificultades experimentadas por el sector financiero en la segunda mitad de 2008 y el primer semestre de este año para afianzar y proteger su negocio", explica un analista experto en el sector asegurador. "Están reinventando su modelo de negocio", agrega.
Para reducir su dependencia de la distribución bancaria, Caser ha puesto especial énfasis en los últimos años en potenciar su red de agentes y corredores.
El fuerte trasvase de todo riesgo a terceros lastra a Pelayo
La picaresca pasa factura a Pelayo. El grupo ganó hasta septiembre 7,6 millones de euros, un 36,5% menos que un año atrás. ¿El motivo? El fuerte ascenso de la siniestralidad, que pasó del 64,3% al 69,8% en un año. Este alza se debe a la decisión de muchos clientes de presentar siniestros de chapa en vísperas de cambiar su seguro de todo riesgo por otro a terceros. La facturación de la compañía bajó un 8,8%, hasta 388,2 millones. Pesa sobre todo el descenso del 6,3% de ingresos en no vida que, con 369,6 millones, supone el núcleo del negocio de Pelayo.La facturación de autos bajó un 7,8%. En pólizas, la caída fue del 4,2%. En cambio, el grupo aumentó un 7,2% su cartera de hogar.