El PP suspende de militancia a Costa por desafiar a Rajoy
El Partido Popular sofocó con la suspensión de militancia la rebelión protagonizada por Ricardo Costa a primera hora de la mañana, cuando insistió en que se sentía aún secretario general de los populares valencianos. Génova se reunió de urgencia y fulminó al hasta ahora mano derecha de Francisco Camps.
La fiesta no se acaba nunca en el PP valenciano. La máxima que acuñó el presidente Francisco Camps hace un par de semanas amenaza con convertirse en otra de las frases desafortunadas pronunciadas por el dirigente popular desde que se conociera su implicación en la trama Gürtel.
Un asunto que parecía al menos apartado, volvió ayer con toda su fuerza: Ricardo Costa reclamó su puesto como secretario general del PP de la Comunidad Valenciana, del que fue apartado hace una semana, al considerar que el partido no le había reprochado ninguna conducta impropia.
"Como militante, como secretario general, es importante que la dirección nacional ratifique la gestión del partido en estos años, ratifique mi gestión como secretario general y también ponga en valor mi honradez como militante, como ciudadano y como secretario general", dijo Costa.
La reacción de Génova fue fulminante. Unas horas más tarde, el Partido Popular emitía un escueto comunicado. "Reunidos de urgencia el presidente y el secretario del Comité Nacional de Derechos y Garantías del Partido Popular para analizar la actitud de don Ricardo Costa han decidido abrir expediente disciplinario y suspender cautelarmente su militancia en el partido", rezó el comunicado.
No tenía muchas más opciones Mariano Rajoy ante el pulso que le echaba Costa, ya que, de admitirlo, habría desautorizado a su secretaria general, María Dolores de Cospedal, quien durante los últimos días ha insistido en que Costa estaba prácticamente fuera del PP.
En el comunicado, el PP "recuerda a todos los militantes su obligación de abstenerse y de hacer manifestaciones o declaraciones que puedan perjudicar la imagen o disciplina interna del Partido y advierte que, de producirse, aplicará los Estatutos del mismo". El hermano del afectado, el diputado y ex ministro Juan Costa, fue prácticamente el único relativamente crítico con la decisión al reclamar claridad al PP en sus decisiones.
Los barones provinciales estudian un posible relevo
El futuro del Partido Popular en la Comunidad Valenciana está en manos en estos momentos tanto de la dirección nancional como de los tres presidentes provinciales. José Joaquín Ripoll, presidente del PP de Alicante, Alfonso Rus, de Valencia, y Carlos Fabra, de Castellón, ya se han reunido en al menos una ocasión sin la presencia de Francisco Camps, presidente regional, para analizar la situación y estudiar posibles alternativas ante un hipotético relevo en el partido.Aunque Camps mantiene el discurso optimista y asegura que no hay problemas entre los populares ni con los tribunales por el caso Gürtel, lo cierto es que el Supremo tiene sobre la mesa el recurso de la fiscalía al archivo del caso del supuesto cohecho impropio cometido por el presidente al recibir regalos. Una reapertura del caso sería letal para Camps.