Bancaja refuerza las dotaciones voluntarias y lastra un 28% el beneficio
El grupo Bancaja cerró el tercer trimestre con un beneficio neto atribuido de 250,8 millones de euros, lo que supone un descenso del 27,9% respecto al mismo periodo del año anterior. La caja atribuyó esta fuerte caída del beneficio a la dotaciones voluntarias que ha realizado a lo largo del año, 470 millones (70 millones durante este último trimestre), para posibles insolvencias. "Sin estas provisiones, el resultado recurrente del grupo se mantendría plano, un -0,07%, respecto a septiembre de 2008", dijo la caja.
Los datos aprobados por el consejo de administración ayer suponen un empeoramiento de las cuentas de la caja que preside José Luis Olivas, ya que hace sólo un trimestre el descenso del beneficio era casi la mitad.
La caja ha optado por cargar a este periodo las posibles insolvencias futuras, aunque esto suponga un abultado descenso del beneficio, es decir, que se podrían haber presentado mejores números rebajando las dotaciones voluntarias. De hecho, los 70 millones provienen directamente del negocio, ya que no hay extraordinarios.
En todo caso el esfuerzo no ha mejorado la tasa de cobertura, que ha pasado del 59,72% de junio al 55,83% de septiembre ni ha consolidar el descenso de la morosidad, que se sitúa en el 5,01%.