Telefónica arranca en Chile el cambio de su marca a Movistar
La modificación del nombre será gradual y la operadora espera que llegue a España para principios de 2010.
Chile ha abierto el camino. La filial de Telefónica en este país se convirtió ayer en la primera en estrenar la nueva política de marca de la operadora, que convertirá a Movistar en su única enseña comercial en España y Latinoamérica. O2 será el nombre para el resto de Europa.
Telefónica se quedará sólo como marca y referencia institucional, pero no ligada a los productos, que ahora asumen todos el nombre que antes se reservaba a los servicios de telefonía móvil.
El cambio de estrategia será escalonado y llegará en un momento distinto a cada país. En España, por ejemplo, no se espera que se produzca hasta 2010, ya que la operadora ha preferido retrasar el lanzamiento ante las restricciones presupuestarias para este ejercicio, según fuentes cercanas a la compañía. Pese a ello, hay directivos que presionan para que el cambio se realice cuanto antes, así que las posibilidades están abiertas.
César Alierta anunció a sus directivos la nueva estrategia de Telefónica a principios de año. El presidente de la operadora ponía así fin a un largo periodo de discusión sobre el futuro de las marcas en la compañía. Al final se optó por utilizar Movistar para todos los servicios, móviles, fijos, de banda ancha y de televisión, pero durante mucho tiempo se estuvo buscando un nuevo nombre distinto al de Telefónica para todos los productos que no fuera celulares.
Tras años de discusión, el peso de la marca Movistar en Latinoamérica ha inclinado la balanza. En varios países del otro lado del Atlántico, el nombre de Movistar se utiliza casi más que el de Telefónica, entre otras cosas porque hay naciones donde la operadora no tiene negocio de telefonía fija.
Pero en otros no es así. Es el caso de Chile o de Argentina, y también de España, donde el cambio va a requerir una fuerte campaña para reposicionar la marca en banda ancha y televisión.
Los únicos países donde nada cambiará son Brasil y el resto de Europa. En la primera nación, la marca seguirá siendo Vivo, mientras que en Reino Unido, Alemania, Irlanda y República Checa ya se usaba de forma común la marca O2, que es la que se va a potenciar ahora.