RBS planea desprenderse de 312 sucursales en Reino Unido y Gales
La entidad británica Royal Bank of Scotland (RBS) está trabajando en un plan respaldado por el Gobierno británico para desprenderse de 312 sucursales en Reino Unido y Gales, una medida radical destinada a satisfacer los requerimientos de la Comisión Europea por las ayudas gubernamentales recibidas por el banco.
Fuentes cercanas a las negociaciones señalaron a Financial Times que la propuesta se encuentra en un estado avanzado y que será tomada en consideración por la comisaria de competencia de la UE, Neelie Kroes, aunque podría ser que ésta quisiera ir aún más lejos con sus requerimientos al banco.
Kroes ha demandado sustanciales desinversiones a RBS para compensar los miles de millones de libras que ha recibido de las arcas públicas como parte de su participación en el programa de recate de activos tóxicos orquestado por el Ejecutivo británico para evitar quiebras bancarias durante el epicentro de la crisis financiera.
Concretamente, Bruselas persigue que el grupo reduzca en un 10% las operaciones bancarias para pequeñas empresas, objetivo que podría ser conseguido a través de la desinversión de la red de sucursales del Sur del país, que principalmente cuenta con pymes como clientes.