De la Vega critica los contratos con "cifras escandalosas"
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, criticó ayer que, mientras las autoridades políticas reclaman el esfuerzo de todos los ciudadanos para salir de la crisis económica, "los que más tienen" se dediquen a blindar sus contratos "con cifras astronómicas escandalosas" o que las entidades financieras primen su "papel particular de repartidoras de grandes sueldos y dividendos".
De la Vega lanzó esta crítica en el Congreso de los Diputados, durante su intervención en el V Encuentro de Mujeres Líderes Iberoamericanas.
Justo al mismo tiempo que el gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, defendía ante los periodistas, en una sala próxima del Parlamento, la pensión vitalicia de 3 millones de euros mensuales que BBVA ha otorgado a su ex consejero delegado, José Ignacio Goirigolzarri. "Creo que se ha cumplido" con las exigencias de claridad informativa establecidas por ley, dijo Fernández Ordóñez en los pasillos de la Cámara Baja, tras intervenir en la Comisión de Presupuestos del Congreso.
El gobernador puntualizó que no se trata de una indemnización, sino de una remuneración que figura en los informes anuales de BBVA que aparecen en la CNMV.
De la Vega, mientras, añadió que existe "el riesgo de que, una vez pasada la tormenta, dejemos de lado los principios que nos han mantenido a flote y volvamos a las viejas recetas".
La número dos del Ejecutivo considera que no sería "razonable ni justo, por mucho que a algunos les interese", que, una vez que llegue la recuperación, todo siga funcionando igual que antes.
Fade defiende la pensión de Goirigolzarri
El secretario general de la Federación Asturiana de Empresarios (Fade), Alberto González, afirmó ayer que es "tan legítima" la pensión anual vitalicia de 3 millones de euros brutos que percibirá el ya ex consejero delegado de BBVA, José Ignacio Goirigolzarri, como la indemnización a un trabajador despedido. "Son condiciones firmadas en contratos en el ámbito privado y es tan legítimo como que cuando se despide a alguien cobre cuarenta y cuatro días por año trabajado", aseguró González.