Ante la disyuntiva de comprar o vender
Las Bolsas se encuentran en un momento difícil. Se dice que suelen adelantar acontecimientos, pero, ¿cómo pueden cotizar la recuperación de las economías si ni siquiera se sabe cómo va a ser? No hay consenso en este sentido, y las figuras geométricas que apuntan los expertos pasan por la uve, la uve doble, la u o la raíz cuadrada. "Hemos pasado por una de las mayores crisis de la historia. El panorama ha mejorado, pero la recuperación ha sido inducida por los planes de ayuda y de estímulo de los Gobiernos y los bancos centrales. No son argumentos sólidos para que las Bolsas puedan prolongar las subidas por más tiempo", dice Jordi Padilla, de Popular Gestión Privada.
Previsiones dispares
Las alternativas que el mercado está reflejando para la recuperación económica también se están trasladando a las Bolsas y a las empresas cotizadas. Los analistas están haciendo previsiones en función del escenario que contemplan; realmente es toda una apuesta. De este modo, se está viendo cómo en las últimas semanas hay recomendaciones de lo más dispar sobre un mismo valor: unos recomiendan comprar, otros vender, y hay quien decide elevar el precio objetivo, mientras que otros lo bajan.
Este tipo de opiniones tan distintas dejan desamparados a los inversores. "La valoración bursátil está basada en unas premisas, como son la economía o las expectativas, y unos parámetros, como la volatilidad, el riesgo de la compañía, la tasa de crecimiento, la deuda, las ventas... Pero estas cifras son subjetivas, depende de la estimación de la persona que esté haciendo el estudio. La modificación de estos parámetros hace que varíe mucho el precio objetivo de las compañías", explica Javier Barrio, responsable de ventas institucionales en España de BPI. "En realidad, un analista juega a ser adivino, porque para establecer una valoración utiliza una serie de parámetros que pueden venirse al traste por el entorno", añade.
Los expertos están convencidos de que el mercado se mueve más en este momento por sentimiento que por fundamentales. Se esperaba una corrección importante que lograra sanear la subida que se prolonga desde los mínimos del pasado mes de marzo. De momento no ha llegado a producirse; sólo se han hecho pequeños altos en el camino. Tampoco se han respetado las referencias técnicas, y de esta forma, Luis Benguerel, de Interbrokers, considera que el Ibex está en subida libre desde que superó los 10.000 puntos. Para él, en este momento es más importante tener en cuenta los niveles de resistencia por si se producen caídas que de soporte.
El descenso de los tipos de interés hasta niveles históricamente bajos en Estados Unidos y Europa, hace, por otro lado, que la renta variable sea la opción más atractiva donde estar. "Si piensas que no hay alternativa mejor no entras en la valoración de las acciones. Ya hay empresas que cotizan con un PER veces que el precio de la acción contiene el beneficio de 15 0 16 veces; no es muy elevado, pero ya dejan de estar baratas", explica Jordi Padilla.
De cualquier forma, los analistas aseguran que la pluralidad de opiniones que convergen ahora mismo en el mercado más que de tratarse de una situación excepcional es más bien diferente, ya que se ha pasado del optimismo a la euforia en pocos meses. "Los más negativos tienen una percepción a medio plazo, y los más positivos lo son, pero en el corto. Al final todo el mundo lo ve parecido", explica Jordi Padilla.
Para el pequeño inversor el mejor consejo es el de la prudencia, y en caso de que tenga interés por una determinada compañía y se encuentre con que hay recomendaciones de compra y venta a la vez "debería tener en cuenta el track record del analista su trayectoria, qué experto lo ha hecho mejor históricamente y las previsiones de la propia empresa", resume Javier Barrio.