Hojiblanca y Cargill se alían para producir aceite de marca blanca
El grupo aceitero Hojiblanca ha dado un giro a su estrategia marquista, principalmente fuera de España. La firma cooperativista inauguró ayer de forma oficial la nueva planta de Mercaóleo la (joint venture que integra al 50% con la multinacional estadounidense Cargill) y que ha conllevado una inversión de 18 millones de euros.
Ambas compañías buscan hacerse un hueco en el mercado internacional del aceite de oliva produciendo, exclusivamente, productos de marca blanca. Hasta ahora, Hojiblanca basaba su negocio en la producción de aceite virgen extra con incursiones puntuales en la marca del distribuidor, por ejemplo, a través del acuerdo que mantiene con el grupo vasco Eroski.
"Hay muchos países donde aún no se conoce el aceite de oliva y creemos que para impulsar el consumo hay que llegar a acuerdos con la gran distribución", aseguraba ayer el director general de Hojiblanca, Antonio Luque. Mientras, el presidente de Cargill España, José María Mateo, fue más allá y destacó que Mercaóleo pretende "satisfacer las necesidades de la gran distribución". "La demanda existe y la posibilidad de acceder a las grandes cadenas está ahí", señaló Mateo. En principio, Mercaóleo tratará de llegar a acuerdos con compañías de distribución estadounidenses y europeas.
La fábrica, situada en la localidad malagueña de Antequera, será la mayor planta de envasado de aceite de Europa con una capacidad de producción anual de 100 millones de litros. En un primer momento, la instalación estará a un 25% de su capacidad ya que, por el momento, no han llegado a acuerdos con ningún grupo internacional. Sin embargo, la planta malagueña ya ha comenzado a producir para el grupo francés Carrefour. Hasta ahora, la producción para la cadena gala estaba en manos de Cargill.
El grupo prevé elevar las ventas un 9,4%
El segmento del aceite es uno de los que más está notando el repunte en el último año de la marca del distribuidor. "Actualmente, el 65% del mercado es marca blanca", explica el director general de Hojiblanca. "Creemos que ya ha llegado a un tope y que más no puede crecer", señala Antonio Luque. Sin embargo, el grupo cooperativista prevé cerrar 2009 con un aumento de su volumen de ventas del 9,4%, desde 297 hasta 325 millones de euros. "Nosotros hemos sido críticos con la marca blanca cuando hay empresas de distribución que sólo dejan sus enseñas en los lineales", apunta.