Sacyr y Ferrovial pugnan por las nuevas autopistas de Irlanda
Varios concursos de obra por más de 1.000 millones de euros en carreteras irlandesas van a medir las fuerzas de Ferrovial y Sacyr en los próximos meses. Ambas han cerrado sus consorcios y preparan ofertas.
Al margen de las oportunidades que surjan en España y de los contratos que ha sacado adelante en Italia o Panamá, Sacyr pretende hacerse fuerte en el mercado irlandés de la obra civil. Un objetivo en el que coincide de pleno con Ferrovial. Las dos españolas han presentado candidatura a la construcción de autopistas con un presupuesto que supera los 1.000 millones.
Los dos últimos procesos son los de la A8, entre Belfast y Larne, y la autopista 11 que irá de Arklow a Rathew. En ambos casos han configurado equipos con garantías para el éxito. Fuentes cercanas al proceso de licitación de la A-8, de 14 kilómetros y con 14 puentes, aseguran que Ferrovial se ha unido a la ingeniería británica Costain y la constructora irlandesa Lagan. Las obras ascienden a 100 millones de libras (unos 109 millones de euros) y el plazo para acceder a la precalificación se cierra en noviembre.
Ferrovial tendrá que competir con otros cinco consorcios, en los que figuran referencias como la británica Balfour Beatty o Galliford.
Más avanzado está el concurso para diseñar, financiar, construir, mantener y explotar el tramo de la autopista 11. Con 16,5 kilómetros y un presupuesto base de 185 millones de euros, Sacyr ha conseguido precalificarse formando parte de un consorcio llamado Atlantic Road Group. Sus compañeros de viaje son la alemana Bilfinger Berger y la entidad financiera RBS. El primer papel de Sacyr sería el de constructor junto a su filial Somague (su peso en esa fase del proyecto es del 65%). Posteriomente, Sacyr Concesiones se encargaría del mantenimiento de la vía. La oferta definitiva deberá estar en manos de la Autoridad Nacional de Carreteras el próximo mes de enero.
Por último, en el sector se da por sentado la pelea de Sacyr y Ferrovial en los contratos promovidos para la construcción del corredor A-5 Western Transport, en Irlanda del Norte. Esta vía de 86 kilómetros y doble calzada repartirá entre 700 y 800 millones de libras (de 765 a 875 millones de euros). Su construcción está prevista para 2012 y entre los contrincantes destacan de nuevo Balfour Beatty y Galliford.
El pasado mes de mayo la empresa que preside Luis del Rivero ya fue precalificada para diseñar y construir dos segmentos de la A-5, con un total de 33 kilómetros, junto a Will Bros y P. Clark & Sons. La inversión conjunta alcanza los 400 millones de euros.
Sacyr cuenta ya con negocios en la red de carreteras de Irlanda a través de dos concesiones: N6 Galway-Ballinasloe y la circunvalación de Dublín M-50. Una vez que las obras estén culminadas Sacyr concesiones tendrá el 45% de la explotación.
Ferrovial, por su parte, opera la N4-N6 de 36 kilómetros desde finales de 2005 y se adjudicó en 2007 la M3 que enlaza Dublín con la región Noroeste.
Blanco reúne a la plana mayor de la construcción
Nueva reunión en la cumbre entre constructoras y Fomento. Fue en la tarde de ayer, en la sede del Ministerio, y esta vez no se trataba de negociar un plan de compensaciones para el sector por el desequilibrio financiero de las autopistas, sino de que Blanco trasladara las líneas maestras de los presupuestos de Fomento para 2010.Fuentes cercanas al Gobierno comentan que se trata de un nuevo gesto de cercanía de José Blanco hacia un sector al que pidió colaboración en la inversión para sacar adelante futuros proyectos relacionados con el AVE.Luis del Rivero (Sacyr), Juan Miguel Villar Mir (OHL), Joaquín Ayuso (Ferrovial), Luis Delso (Isolux), Marcelino Fernández Verdes (ACS), David Taguas (Seopán) y Juan Lazcano (CNC) fueron algunos de los que acudieron a la cita.