Vincci suma otros cuatro hoteles y activa una revisión integral de costes
Vincci Hoteles incorporará en los próximos meses cuatro hoteles en régimen de gestión, lo que elevará su cartera a 38 establecimientos repartidos por España, Túnez, Estados Unidos y Portugal. La cadena española propiedad de la familia Calero abrirá próximamente en Málaga, Cádiz, Tenerife y Lisboa, en el marco de un plan de expansión en el que mide al detalle cada decisión que se adopta.
No obstante, "no hay obsesión en coger nuevos hoteles", explican desde la cadena hotelera, a pesar de que dada la situación del mercado se estudian oportunidades con frecuencia.
El grupo hotelero, que tuvo una cifra de negocio de 129 millones de euros en 2008, ha activado un plan integral de reducción de costes. "La crisis nos ha obligado a reestructurar procesos en los hoteles y a optimizarlos. Se han revisado exhaustivamente los costes y las políticas de compras", explican desde Vincci.
Vincci asegura que la demanda hotelera ha tenido una evolución que hace a la cadena muy difícil realizar una estimación de crecimiento para el 2009. "El principio de año fue muy duro", aseguran, "nadie viajaba". "Pero el verano nos ha sorprendido gratamente", añaden. Y es que los hoteles de la cadena -el 70% son urbanos y el 30% vacacionales- han alcanzado el 90% de ocupación media en verano. Incluso se han llenado en algunos casos.
No obstante, la cadena admite que se ha elevado la ocupación sacrificando márgenes por la vía de la reducción de tarifas. "El verano ha sido bueno pero no sabemos cómo será el tramo final del año". Vincci Hoteles aspira al menos a mantener la cifra de negocios de 2008, "pero es muy complicado hacer estimaciones o prever tendencias". La ocupación en la temporada de verano demuestra "que la gente ha salido de vacaciones". Lo que ha detectado es que la estancia media se ha reducido pero, como compensación, se ha incrementado la rotación de viajeros en los hoteles.
Ventajas de ser ni pequeño ni grande
Vincci Hoteles tiene 9 años de vida. La familia Calero, ex propietaria de la cadena Tryp, decidió aprovechar su experiencia en el negocio de la gestión hotelera tras la venta de esta última cadena Meliá y crear su propio grupo hotelero. El objetivo es consolidar una cadena con medio centenar de establecimientos, un objetivo para el que no hay plazos fijos. El comité de dirección tiene un trato directo con el director de cada hotel, explican desde Vincci como muestra de las ventajas de no tener una estructura demasiado grande. La cadena de la familia Calero cuenta con 2.000 empleados en plantilla. Los hoteles de cuatro estrellas tienen una implantación urbana, mientras que los de cinco son vacacionales.