El dorado emergente
China e India han mantenido crecimientos económicos en un entorno de grave crisis
Desligamiento, reequilibrio , éstos son algunos de los términos que hemos escuchado y leído hasta la saciedad en los últimos años en medios de comunicación y libros especializados (y generales también) para describir la pujanza de muchas economías emergentes frente a los países desarrollados.
La recesión económica que parece estamos dejando atrás, periodos en los cuales tradicionalmente los desequilibrios de los países emergentes salen a relucir, ha supuesto una especie de confirmación -por si quedaba alguna duda- de que esta vez sí va en serio. Mientras la intensidad de la recesión alcanzaba valores no vistos desde la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos, Europa o Japón, países como China e India registraban crecimientos económicos aunque éstos fueran lógicamente menores. Incluso la "eterna promesa", Brasil, lidiaba las caídas de las exportaciones, basadas en materias primas en gran medida, con mucha dignidad, y los últimos datos apuntan a que disfrutará de una pequeña expansión este año y posiblemente un crecimiento del 5% o superior el año que viene.
En esta era virtuosa de las economías emergentes uno de los grandes beneficiados han sido los precios de las materias primas, ya que en la etapa de acelerada industrialización en la que están inmersos grandes países como China e India, el consumo de las mismas se intensifica. La presión de la demanda no se ha visto igualada por una oferta que en determinados tipos de materias es bastante rígida. Sería el caso del cobre y el oro, por ejemplo, como señala Evy Hambro, de la gestora norteamericana Blackrock, uno de los gestores de mayor prestigio en este tipo de activo.
Las implicaciones a nivel de gestión de inversiones tanto institucionales como privadas son enormes, como pone de manifiesto el gráfico central. æpermil;ste muestra el rendimiento en euros en el acumulado de los últimos diez años de los índices Lipper que agrupan a todos los fondos de inversión que pertenecen a las categorías Renta Variable Emergentes Global, Renta Variable Sector Recursos Naturales y Renta Variable Eurozona. Estos índices proporcionan una visión bastante precisa de cuáles son los retornos obtenidos por dichos fondos por término medio y en realidad por dichas clases de activo.
Las diferencias, como puede apreciarse, son muy abultadas, por lo que haber tomado una decisión activa de proporcionar un peso más elevado a las bolsas emergentes o al sector de las materias primas en nuestras carteras de inversión hubiera reportado pingües beneficios. De hecho, el peso de los mercados bursátiles emergentes dentro de los índices que buscan reflejar el comportamiento de las Bolsas mundiales en su conjunto y actuar de referencia, como el MSCI World, siguen siendo bastante reducidos. En lo que va del presente año las rentabilidades de los diferentes mercados bursátiles superan ampliamente el 50% y en casos como Brasil, el 70%. De este modo doblan y más a las Bolsas de los países desarrollados y lideran con claridad los rankings de rentabilidad.
Existen casos como los de los propios gestores de fondos de la conocida casa francesa Carmignac, que identificaron esta tendencia de largo plazo hace bastantes años y de manera activa han apostado por sobreponderar los emergentes y las materias primas en las carteras de sus fondos. Esta decisión ha contribuido parcialmente a que las rentabilidades de sus fondos hayan destacado.
El inversor minorista español puede beneficiarse también de la posible continuidad de esta tendencia en los próximos años. Sin duda, la inversión colectiva es la mejor manera de acceder a este tipo de inversiones que, por su lejanía y mayor riesgo, lleva aparejados dificultad y elevados costes. Los fondos de inversión y más recientemente los fondos cotizados (o ETF en su terminología anglosajona) son los productos concretos que puede utilizar el inversor, siempre con la ayuda de un asesor profesional.
En los fondos de inversión se puede buscar un "fondo índice" de bajo coste que básicamente obtenga el mismo rendimiento que los índices o bien un fondo de gestión activa que potencialmente pueda superarlos. La oferta es amplia y la ventaja fiscal de no tributación por traspaso entre fondos, atractiva.
Existen numerosas gestoras internacionales con potentes equipos de gestores y analistas, en muchas ocasiones locales, con fondos de gestión activa. En el caso de los ETF es importante buscar aquellos con la máxima liquidez y mejor historial, ya que el objetivo de replicar el comportamiento de índices de bolsa emergente no es en ocasiones tan sencillo. Por el contrario, ofrecen una agilidad que no tienen los fondos de inversión.
Juan Manuel Vicente. Director de análisis de Lipper
Claves de dilema
- El análisis macroeconómico y microeconómico de las principales economías emergentes arroja unas conclusiones sencillas y positivas que todo el mundo puede entender.- Los mimbres de la cesta: estabilidad política, educación, tamaño, "hambre" de progresar y comerse el mundo, de su población, etc., indican que su fuerte desarrollo continuará.- La clave de cualquier cambio a este escenario hay que verla, en mi opinión, en clave política. Hasta ahora la gestión y estabilidad política han sido destacadas, pero todo es susceptible de cambiar y necesita ser controlado con rigor.