_
_
_
_
Legislación

La crisis económica aparca la reforma de la supervisión financiera

La crisis, el alza del desempleo, las dificultades para llevar a buen término el diálogo social y las negociaciones sobre los Presupuestos Generales del Estado, han dejado en la cuneta la prevista reforma del sistema de supervisión financiera anunciado por el Gobierno hace casi un año y medio.

En mayo de 2008, el entonces vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, anunciaba en la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso que el Ejecutivo planeaba una reordenación de las competencias en materia de supervisión e inspección sobre el sistema financiero, en línea con lo acordado días antes por los ministros de Finanzas de la Unión Europea (Ecofin).

El proyecto contemplaba separar la supervisión de la solvencia de la de los comportamientos y prácticas en los mercados y, según explicó Solbes, tenía por objeto mejorar la eficacia en la vigilancia de la solvencia y competitividad de los intermediarios financieros y de la transparencia de los mercados en los que actúan.

Ello supondría la transformación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en detrimento de la Dirección General de Seguros (DGS), cuyas funciones serían asumidas por un nuevo organismo (la Comisión Nacional de Servicios Financieros), que vigilaría a los inversores, a los asegurados y a los ahorradores.

El Banco de España, se dedicaría a asegurar la solvencia no ya sólo de bancos y cajas, sino también del resto de entidades financieras, incluidas aseguradoras e instituciones de inversión.

El proyecto no aclaraba algunos puntos, como por ejemplo cuál sería el destino de los funcionarios de la Dirección de Seguros una vez que ésta se diluyera en el Comisión de Servicios Financieros.

Casi un año y medio después del anuncio, apenas queda la previsión de que la ley sobre unificación de supervisores financieros llegue al Parlamento a comienzos de 2010, y ni los grupos parlamentarios, ni los sindicatos ni los organismos afectados tienen en su agenda de momento la reforma de la supervisión.

Según explicaron a EFE fuentes del Ministerio de Economía, la reestructuración de la supervisión tendrá que esperar a que se tome una decisión en la Unión Europea, donde se estudia el asunto con vistas a adoptar un modelo común que podría ser más similar al actual que al que contempla dos supervisores o "twin peaks".

Además, el proyecto data de hace más de un año, "antes de que empezara la crisis" y se planteara la reestructuración del sector financiero, que apenas ha empezado.

Los analistas consultados por EFE apuntan también a la buena evolución de las bolsas, que ha proporcionado un respiro al ámbito financiero y ha contribuido mitigar la urgencia de la reforma.

En el ámbito político, el secretario de Economía del PP, Álvaro Nadal, reconoció a EFE que "con la que está cayendo", la reforma de la supervisión no es una prioridad, y aseguró que "nadie pide en este momento" que se retome el proyecto.

Destacó que la necesaria adecuación a las normas europeas hace inútil diseñar un modelo de supervisión que posteriormente haya que adaptar a las recomendaciones de la Unión Europea.

El portavoz del PNV en el Congreso, Pedro Azpiazu, aseguró que ahora toca hablar de presupuestos, y admitió que en la actualidad "el único que habla de supervisión es el presidente de Estados Unidos, Barack Obama".

Sí demuestran más interés analistas y gestores, que un año después del anuncio de la reforma, ven cómo "el globo sonda" se ha quedado en nada.

Los profesionales del sector están de acuerdo en la necesidad de reformar el sector, en particular el papel de los reguladores y de las agencias de calificación, y señalan el caso Madoff como un ejemplo de cómo no se deben hacer las cosas, aunque un año después, con las bolsas al alza, las autoridades parecen posponer el asunto.

No obstante, la necesidad de acometer una reforma es admitida y la cumbre del G-20, que la semana que viene se celebrará en Pittsburg, abordará cuestiones relativas a la supervisión y la regulación de los mercados, mientras que fuentes del mercado enfatizaron la importancia de culminar la reforma de los reguladores y mejorar la supervisión para evitar crisis financieras.

El pasado verano, el director de Asuntos Monetarios y Mercados de Capitales del Fondo Monetario Internacional (FMI), José Viñals, abogó por repensar el perímetro de la regulación, con mayores controles y que los supervisores puedan aplicar medidas de prevención rápida de manera que no se amenace al sistema.

Archivado En

_
_