Kutxa decide a contracorriente abrir por las tardes todas sus sucursales
Kutxa sorprendió ayer al resto de bancos y cajas con el anuncio de la apertura por las tardes de toda su red de oficinas. Por su parte, el Banco Santander y los sindicatos analizaron ayer la posibilidad de cerrar las sucursales los sábados a partir de octubre, pero recuperando esas horas en las jornadas de lunes a viernes.
La entidad de San Sebastián cuenta con 335 oficinas repartidas por 14 comunidades autónomas. Todas sin excepción abrirán por las tardes a partir de la próxima semana. Los trabajadores (tiene una plantilla total integrada por 2.823 personas) comenzarán su jornada a las nueve de la mañana y se retirarán a comer a las 14 horas. Pero volverán al tajo a las 16 horas para continuar hasta las 17,45 horas. Será el horario de lunes a jueves.
Los viernes, la salida queda fijada entre las 14 (para el servicio de caja) y las 14,30 horas, en este caso para la asesoría personal.
El anuncio de ayer de Kutxa tiene un matiz. La tarde se reserva para los clientes que necesiten servicios de "gestión y asesoramiento comercial". Las operaciones que requieren más explicaciones y dejan mayores márgenes: hipotecarios, préstamos personales, créditos a las empresas... Los clientes "de ventanilla" tendrán que limitarse a acercarse a las sucursales de Kutxa sólo por la mañana. Algunos analistas señalaban ayer que la caja pretende con esta medida fidelizar a sus clientes y captar a otros con este servicio extra.
La entidad que preside Xabier Iturbe definió el nuevo horario como "una decisión pionera en el sistema financiero español", que representa además "una aproximación a los estándares europeos". Desde Kutxa añaden que el cambio que pone en marcha el próximo día 14 también busca "reforzar la estrategia comercial en unas circunstancias de mercado que están resultando especialmente complicadas para el sector financiero".
Encuentro con los sindicatos
La medida, desde luego, ha cogido a las cajas y bancos mirando en sentido contrario. Precisamente ayer, el Banco Santander tuvo una reunión con los sindicatos para abordar el cierre de sucursales los sábados. Con los empleados de 3.000 oficinas pendientes del tema, las centrales calculan que la entidad que preside Emilio Botín puede ahorrarse unos 17 millones al año. Según los sindicatos, el Banco Santander estudia bajar la persiana los sábados a partir del próximo octubre.
BBVA y Popular también sondean la clausura del sexto día de la semana, y entre los tres, sumando al Santander, representan al 85% del sector. Las cajas, por su parte, tienen un convenio que especifica el cierre de los sábados a cambio de la apertura los jueves por la tarde, pero es un marco flexible, dependiendo de cada entidad. Fuera de ese escenario quedan las oficinas que operan en las grandes superficies, en organismos o están ubicadas dentro de las instalaciones de grandes empresas. En España son unas 200 y tienen un horario ligado al de sus clientes.
La crisis económica ha provocado una caída de la actividad en bancos y cajas, que además se muestran muy cautos al conceder créditos.
Menos horas y más internet y teléfono móvil
Las nuevas tecnologías, como la banca por internet y la telefonía móvil, están reduciendo paulatinamente la asistencia de los clientes a las sucursales, según los analistas. De agudizarse esta tendencia, las oficinas tenderán a reducir sus horarios, no a aumentarlos.Otros expertos optan por buscar fórmulas que rentabilicen unos locales que están 17 horas cerrados, a pesar de que se ubican en las mejores zonas de las poblaciones. Los costes fijos matan a las sucursales, por lo que el sector ha emprendido en el último año un plan de ajuste (cierre de 1.000 centros y más de 10.000 despidos).El descanso de los sábados es una vieja aspiración de los sindicatos, que ahora recurren a la crisis económica para justificarlo. En las negociaciones con Banco Santander, plantean aumentar la jornada diaria en 30 minutos para recuperar las 143 horas laborales que suman los sábados del año. BBVA ya inició el año pasado el cierre de parte de su red el sexto día de la semana. Ahora no trabaja la mayoría.