El gasto público y el consumo de las familias rescatan a Alemania de la crisis
Los datos lo avalan, el plan de estímulo del Gobierno de Angela Merkel ha surtido efecto. De abril a junio de este año, y tras cuatro trimestres seguidos de caídas, Alemania registró un crecimiento del PIB del 0,3%, lo que supuso poner fin a la peor crisis desde la Segunda Guerra Mundial. El incremento en el gasto público y en el consumo de los hogares, de un 0,7% y un 0,4%, respectivamente, fueron los responsables de la puesta en marcha de la locomotora europea, según publicó ayer la oficina estadística alemana, Destadis. Un crecimiento económico que podría ser incluso mayor en el tercer trimestre, según estimaciones recientes del Bundesbank.
No obstante, el Gobierno y algunos expertos han querido ser prudentes acerca de los primeros síntomas de recuperación. Y es que las cifras no arrojan un balance optimista en términos anuales. En el segundo trimestre de 2009, el PIB cayó un 7,1% en relación con el mismo periodo del año anterior, el mayor descenso desde que arrancó la serie en 1970.
El esfuerzo del Ejecutivo ha quedado, no obstante, plasmado en cifras. De abril a junio, respecto al mismo periodo de 2008, el gasto público aumentó un 2,3%. Las ayudas estatales se tradujeron en un incremento en las compras de vehículos (6%), lo que provocó un alza en el consumo de los hogares.
En este sentido, la canciller alemana, que se enfrenta a unas elecciones generales el próximo mes, aprobó un plan de estímulo de alrededor de 85.000 millones de euros. En el programa se incluyó un pago, similar al español, de 2.500 euros que el Estado entrega a aquellas personas que cambien su viejo coche por otro nuevo. El Estado alemán subsidia además a los fabricantes de vehículos para mantener las plantillas de trabajadores sin despidos en momentos de baja demanda. Un gasto público que, según la oficina estadística alemana, ha disparado el déficit del sector público alemán. En la primera mitad del año se situó en los 17.300 millones de euros, es decir el 1,5% del PIB, mientras que en el mismo periodo de 2008, Alemania registró un superávit de 7.000 millones.