Siemens trae a España el metro sin conductor
Se prevé que funcione a partir de octubre en Barcelona.
E l metro está sufriendo una gran revolución en los últimos tiempos. La implantación de trenes subterráneos no tripulados, que ya se ha realizado en otras ciudades del mundo como París, Lyon, Nuremberg o Helsinki, ha llegado al metro de Barcelona, gracias a la tecnología utilizada por Siemens. Concretamente, a la línea 9, en donde ya está en proceso de prueba para ponerlo posteriormente en funcionamiento, según la previsión de la empresa, en el mes de octubre. La llegada de este metro sin conductor a la ciudad condal supone el primer caso de esta tecnología en nuestro país.
La conducción automática de los trenes ha causado siempre un temor en la ciudadanía. La desconfianza que genera para muchos usuarios una máquina programada para transportar personas podría llevar a que no se utilizara el servicio. César Losada, director del segmento de negocio de señalización ferroviaria de la compañía tecnológica alemana, explica que "todo debe tender a automatizarse, es ley de vida". Asimismo, y con el fin de argumentar esa afirmación, comenta: "Cuando viajamos en ascensor ya no pensamos que no hay un ascensorista que lo maneje. En el momento en el que se automatizaron los elevadores pareció extraño y ahora es algo normal", sentenció.
Una de las empresas precursoras de esta técnica ha sido, precisamente, Siemens. A través de su programa de investigación I+D, ha dado vida a dos productos. Entre ellos, Citival, un tren (metro) modular inteligente sin conductor y con neumáticos.
Muchas son las líneas de metro en las que está implantada esta tecnología. "La línea 1 de Lyon, en París la línea 1 y la 14, en Budapest la líena 2, etc.", enumeró el experto, a las que se sumará el proyecto de Barcelona "si todo va según lo previsto" después de que concluya "el periodo de marcha en blanco", en el que se prueban los comboyes "sin viajeros", explicó.
En referencia al gasto que constituyen estos vagones nuevos, Losada comentó que "supone un ahorro en torno al 20%", en comparación con los convencionales, y añadió que "el coste fijo que representan los conductores se trasladaría a operadores de mantenimiento". Un hecho que permitiría que no se produjeran protestas por parte de los trabajadores, principalmente, debido a que los maquinistas pasarían a desempeñar otra labor, en este caso, de mantenimiento.
Así, lo que derivaría de esta innovación a nivel de usuario sería, sobre todo, una mayor facilidad a la hora de realizar los deplazamientos, ya que los trenes incrementarían la frecuencia de paso. "Un metro convencional está detenido unos 120 segundos en las estaciones, mientras que con el sistema automático se reduce a 80 segundos". Dato que "es un avance del futuro en el presente en el que vivimos", reflexionó. Por tanto, esta disminución conllevaría que pasase "un tren cada menos tiempo" y así e l trafico estaría "más descongestionado", afirmó este experto.
En este sentido, por ejemplo, las grandes aglomeraciones que se producen en las estaciones en partidos de fútbol o manifestaciones desaparecerían, sobre todo, por la mayor afluencia de trenes. Cabe resaltar que, según Siemens, este nuevo diseño aporta una mejora en la disposición y configuración del tren. La avanzada función sin conductor de la tecnología de control de trenes basada en comunicaciones permite adaptar dinámicamente la capacidad de transporte enganchando o desenganchando coches en función del volumen del tráfico. "Dependiendo de la afluencia de personas, se insertarían, o no, vagones desde el centro de control", manifestó Losada.
El objetivo claro del programa de desarrollo de Siemens era reducir el consumo energético y disminuir al mínimo las emisiones de polvo y ruido. La reducción de consumo eléctrico se debe a un sistema de "frenos 100% eléctrico" que reduce el gasto y disminuye el polvo y ruido al eliminar "los tiempos de reacción" del conductor por el automatismo.
En caso de emergencia, más seguridad
La seguridad del sistema será muy amplia, dado que el programa automático, según manifestó Losada, tiene "un margen de error mínimo". En caso de accidente, acudiría rápidamente un servicio de emergencia. También, indicó que no habría peligro de que "los usuarios se quedasen atrapados entre el andén y el vagón" ya que "las puertas plataformas" anulan "esa posibilidad", finalizó este experto de Siemens.