El hombre, cada vez más lejos de la Luna
Durante este fin de semana, los miembros de Comisión de Planes para Viajes Espaciales Tripulados, encabezada por el ejecutivo aeroespacial Norman Agustine, mantuvo una reunión con funcionarios de la Casa Blanca para emitir un informe sobre los problemas financieros de la NASA. El análisis económico, que no estará listo hasta finales de este mes, parece hacer cada vez más difícil la vuelta del hombre a la Luna.
La NASA no tiene suficiente dinero para concretar el plan de poner astronautas en la Luna para 2020. Además, el satélite natural de la Tierra no debería ser el objetivo central de la exploración espacial tripulada, según ha publicado recientemente Washington Post.
Desde hace tres años la NASA viene sufriendo problemas de presupuesto y, además de reducir personal, ha tenido que aumentar las formas de hacer economías en sus diversos proyectos. En 2004 el entonces presidente, George W. Bush, anunció su Visión para la Exploración Espacial que incluyó el retorno del hombre a la Luna para la década de 2002, así como la preparación de viajes tripulados a Marte en las décadas siguientes.
Sin embargo, en la administración norteamericana se piensa que un plan de ese tipo implicaría abandonar la Estación Espacial Internacional (EEI) la cual sería arrastrada por la fuerza gravitatoria de la Tierra hasta estrellarse en Pacífico sur en 2016.
La EEI es un proyecto internacional concebido a un costo de unos 100.000 millones de dólares. Se espera terminarla a finales del próximo año o comienzos de 2011, que incluiría la creación de una base lunar. Esa estrategia implicaría el viaje de naves tripuladas a asteroides cercanos a la Tierra y que están más allá de la magnetosfera protectora de nuestro planeta.
Podrían viajar a Fobos, una pequeña luna de Marte o volver a la Luna, pero no como objetivo central de la exploración espacial. Por otra parte, llevar astronautas a la superficie de Marte y traerlos de regreso a la Tierra sería onerosamente prohibitivo.
El agujero presupuestario de la NASA llegará a los 50.000 millones en 2020.