Madrigal plantea nuevas operaciones en alimentación
La firma estudia entrar en Ibersnack que surte de aperitivos de marca blanca para Mercadona.
Madrigal Participaciones, el vehículo de inversión de capital riesgo de las seis cajas de ahorro castellanoleonesas (Caja de Ávila, Caja de Burgos, Caja Círculo, Caja Duero, Caja España y Caja Segovia), estudia la ampliación de su cartera de empresas del sector agroalimentario. En esta ocasión, el objetivo está puesto en Ibersnack, compañía vallisoletana que provee de aperitivos a los supermercados Mercadona. Los portavoces de la entidad reconocen que es una propuesta que está estudiando la firma, "entre otras cuatro o cinco", pero aseguran que aún "no hay nada decidido".
En esta apuesta por el sector agroalimentario, el pasado mes de junio Madrigal entró en el accionariado del Grupo Siro, que fabrica pan y bollería de la marca Hacendado para Mercadona, entre otros, mediante una aportación de 60 millones de euros, lo que le ha dado una participación en el grupo alimentario de entre el 20% y el 27%.
Este dinero ha servido, según reconocen fuentes del propio grupo de alimentación, para adquirir tres plantas de producción que Sara Lee (fabricante de los productos Bimbo) tiene situadas en Burgos, Málaga y Gran Canaria, en una compra anunciada el 13 de julio. "Una parte importante del capital aportado por Madrigal se ha destinado a esta adquisición y ha quedado una determinada cantidad para cubrir las necesidades de liquidez". En este punto, los porcentajes no han sido desvelados.
El presidente de Madrigal, Agustín González, explica que "uno de los criterios que los accionistas tuvieron en cuenta para aprobar la operación fue que ésta permitiría al Grupo Siro aprovechar las ocasiones de negocio que la situación del mercado genera, aumentando su volumen y la plantilla".
En el Grupo Siro coinciden en destacar lo bien que casó el sostén de la sociedad de capital riesgo con los intereses de la empresa alimentaria. "Pretendíamos obtener recursos para afrontar las oportunidades creadas en esta nueva coyuntura y que el crédito sindicado que teníamos, de 240 millones de euros para desarrollar el plan estratégico 2007-2010, no había contemplado en su origen".
Desde el grupo se resalta, igualmente como una de las razones que inclinaron la balanza hacia Madrigal el hecho de que "no existía, por su parte, ninguna vocación de permanencia. Necesitábamos ayuda para crecer en un momento determinado, pero sin renunciar a la propiedad".
El Grupo Siro facturó 264 millones de euros en 2008 y y para este año prevé un incremento del 25%.