La concertación social avanza en las regiones pese al parón nacional

La división manifiesta generada entre la patronal, de una parte, y Ejecutivo y sindicatos por otra, tras la definitiva ruptura de las negociaciones del pacto social, no ha impedido que a escala regional, gobiernos autonómicos y agentes sociales avancen en la concertación. Es el caso de Castilla la Mancha, donde mañana se firmará el documento tripartito.

En él se expone que alcanzar el consenso en la actual coyuntura económica y social "tiene un valor superior" al de otros momentos históricos. En cuanto a medidas concretas, se establece un "Plan de Choque" dedicado a atender a los desempleados que han agotado su prestación.

Euskadi también logró llegar a un acuerdo, la semana pasada, en el que se incluyó la ampliación hasta 800 euros de las ayudas a formación dirigidas a los trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo (ERE).

Especialmente llamativo es el caso de Andalucía, donde el presidente de la patronal (CEA), Santiago Herrero, es también vicepresidente de la CEOE y responsable de las negociaciones de ámbito nacional. Lejos de la línea dura que ha mostrado la confederación empresarial en sus reuniones con Moncloa, UGT y CC OO, la negociación parece fluir con mayor facilidad en el sur.

"Aquí la patronal no está intoxicada por la campaña de la CEOE nacional", aseguran desde CC OO Andalucía. Según el sindicato, Herrero llegó un acuerdo la semana pasada en el que se compromete a desbloquear tras el verano los convenios colectivos pendientes de revisión. Se trata de un primer paso hacia la firma de un pacto social que consideran cercano.